(Foto referencial: Sedapal)
(Foto referencial: Sedapal)

El seguro de para afrontar los daños ocasionados por el aniego de aguas servias en San Juan de Lurigancho asciende a un valor máximo de S/ 10 millones. En caso que este monto no cubra las pérdidas de las viviendas y negocios, la empresa estatal se hará cargo, explicó a gestion.pe su gerente general, Michael Vega.

"No hay problema por el monto del seguro, cubrirá los daños 100%. Lo que faltaría cubrir, en caso haya un excedente, lo cubrirá Sedapal", sostuvo.

Para poder calcular el monto de las pérdidas, es necesario que se terminen los trabajos de extracción de las aguas y se pueda empadronar a todas las familias damnificadas; para luego resarcirlas económicamente, tal como lo contempla el Reglamento de Calidad de los Servicios de Saneamiento.

"Nosotros tenemos un seguro multirriesgo que va a cubrir todas las afectaciones que han habido; desde daños a viviendas, bienes, negocios, entre otros. Ya se están realizando los informes y el levantamiento de la información con las personas afectadas, para ver qué cosas se dañó producto de esta emergencia", comentó Vega.

"Se va a hacer una inspección casa por casa y negocio por negocio. Por ello, se invoca a los afectados que indiquen lo que verdaderamente se ha dañado producto de esta emergencia. Tenemos antecedentes en el que algunos se han querido aprovechar de la oportunidad. Apelamos a la población para que nos den esas facilidades y su colaboración", agregó.

Al ser consultado sobre la responsabilidad que tendrían los constructores del segundo tramo de la Línea 1 del Metro de Lima, el funcionario reiteró que como prioridad tienen que solucionar el secado de las calles.

"En este momento nuestra intervención ha sido inmediata, independientemente de quien pueda ser el responsable porque sin agua y sin desagüe se podría generar un problema mayor; ya las investigaciones determinarán quiénes son los responsabilidades", refirió a gestion.pe.

¿Qué provocó el aniego?
Vega refirió que la tubería matriz sufrió una fisura que permitió el ingreso de piedras y tierra que, junto a las aguas residuales, se acumularon hasta el punto de reducir el diámetro de circulación del desagüe.