INIA mejoró la calidad y productividad del mango de exportación de Piura, a través de acciones de transferencia tecnológica a pequeños y medianos productores del Centro Poblado del Valle de los Incas, en Tambogrande. (Foto: Difusión)
INIA mejoró la calidad y productividad del mango de exportación de Piura, a través de acciones de transferencia tecnológica a pequeños y medianos productores del Centro Poblado del Valle de los Incas, en Tambogrande. (Foto: Difusión)

La temporada de ya pasó su periodo de peak de exportaciones, mientras las proyecciones del sector indican que se despacharán 131,000 toneladas, cifra bastante inferior a las 204,000 toneladas que se lograron en el 2017-18.

En declaraciones a , Juan Carlos Rivera, gerente general de la Asociación de Productores y Exportadores de Mango Peruano (APEM) comentó que el desarrollo de la campaña sugiere que el volumen exportado total será un 36% más bajo, pero que esta disminución será paulatina ya que aún queda fruta disponible.

Este menor volumen, según Rivera, se debe a dos factores: “En el invierno de Perú, estamos hablando de junio a agosto, no hubo las condiciones para una floración grande o abundante, lo que responde a un tema climático”.

El representante de APEM explicó que los pronósticos de la asociación ya indicaban un menor tonelaje, pero cuando comenzaron a aparecer los frutos en los árboles debieron reducir nuevamente la expectativa debido a muchos de estos se cayeron por falta de riego.

“Este fruto pequeño se cayó, incluso a lo que habíamos pensado que iba a haber menos, en diciembre nos dimos cuenta de que iba a haber menos que eso todavía”, agregó Rivera.

Sin embargo, detalló que, aunque se espera un menor volumen de mango exportado, Perú continuará siendo un actor relevante en el mercado.

Lo anterior, se explica en parte porque el mango peruano se encuentra sin competidores en el mercado estadounidense y europeo, al menos por un par de semanas más.

“En este momento de la campaña, Perú prácticamente no tiene competencia, estamos saliendo prácticamente solos, sin embargo, dentro de 4 semanas por lo menos ya empezará a salir Brasil a Europa y por otro lado México”.

“En nuestra ventana no tenemos competencia por ciertas semanas, luego al final de la campaña sí hay una competencia, pero México es solo para el mercado de Estados Unidos y obviamente tiene otros costos, otra logística y es diferente. Nuestras competencias en los mercados que atendemos son, en el caso de Estados Unidos, Ecuador y en Europa es Brasil y Costa de Marfil”, precisó Rivera.

Por otra parte, Rivera destacó que hasta la semana 3 se habían exportado casi 83,000 toneladas, cifra superior a las 79,000 toneladas que se habían enviado hasta la misma semana del 2018. Asimismo, hasta la tercera semana del año, Europa concentraba el 60% de las exportaciones de mango peruano, siendo España y Países Bajos los principales destinos para las cargas aéreas.

Respecto a los embarques marítimos, el 37% se ha despachado a Países Bajos y un 36% a Estados Unidos, mientras que la totalidad de los envíos terrestres se dirigieron a Chile.

Aumento de los rendimientos
En cuanto al futuro de la industria de mango peruano, el gerente general de APEM aseguró que la principal tarea es aumentar el rendimiento de las fincas.

“Perú tiene una realidad bien interesante y es que la producción es muy fragmentada; hay más de 28,000 hectáreas sembradas para mango de exportación, las que están en manos de 14,000 productores”.

Rivera explicó que el tamaño promedio de las plantaciones de mango en el país es de 2 hectáreas y que APEM está realizando diferentes tareas para tratar de aumentar e igualar la producción entre las fincas, a pesar de la fragmentación.

“El promedio de producción de las fincas peruanas es de 8 toneladas por hectárea y en el mismo Perú otra finca o varias fincas producen 25 toneladas por hectárea, entonces no tenemos que sembrar más, sino producir mejor”, agregó.