Viviendas
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La gran mayoría de los peruanos carece de un seguro que proteja su vivienda frente a eventuales catástrofes. Cuando estas se presentan y las viviendas son destruidas o sufren severos daños, las familias quedan a la espera de la ayuda del Estado, como ocurrió en el norte con el Fenómeno El Niño del 2017. Para cambiar esta situación, la Asociación Peruana de Empresas de Seguros (Apeseg) le propondrá al Gobierno establecer un seguro que sea obligatorio para todos los

La propuestas de un seguro de vivienda catastrófico obligatorio fue presentado al Ministerio de Vivienda por el gremio de aseguradoras en el 2017, luego de los desastres generados a raíz del fenómeno El Niño, pero no logró despegar, señala Renato Bedoya, gerente de Riesgo de Apeseg, quien adelanta que en el primer semestre de este año presentarán nuevamente una propuesta similar.

En la actualidad, los seguros de vivienda solo se vuelven obligatorios cuando este bien se adquiere mediante una hipoteca, y duran lo mismo que la hipoteca. En tanto, el seguro obligatorio propuesto sería un producto estándar, de bajo costo y cobertura moderada, que permitiría a las familias acceder a una compensación de US$ 3,000 a US$ 5,000 para adquirir solo un módulo básico de vivienda. El costo mensual rondaría los S/ 5, que podrían ser cobrados mediante los recibos de luz.

“Si hay un terremoto de ocho grados, en cualquier lugar, causaría mucho daño y las viviendas colapsarían. El Gobierno debería ocuparse de prevenir en lugar de reparar los daños, y este seguro le serviría para no verse tan impactado financieramente”, dijo Bedoya a Gestion.pe.

Si bien tanto la prima pagada por el asegurado como la indemnización estipulada son , la Apeseg prevé estructurar su propuesta de modo que estas condiciones sean solo una base mínima obligatoria, pero que se permita a las familias obtener una mayor cobertura, mediante un pago adicional.

Sin embargo, una dificultad aparente es el alto índice de autoconstrucción de las viviendas, que impide contar con la garantía del cumplimiento de las normas técnicas de construcción.

Según sostiene Bedoya, se evaluará crear el seguro con un principio de mutualidad, que permita diversificar el riesgo, al tomar en cuenta tanto las viviendas que cumplen con los estándares de construcción como las que no. “Así podremos sacar una prima colectiva y tener un producto de aseguramiento para todos”, indica el gerente de