Redacción Gestión

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Los Cabos, México (Reuters).- El presidente de la Comisión Europea sugirió que es necesario encontrar una manera para apoyar directamente a , en lugar de prestarle dinero al Gobierno para que los recapitalice.

En comentarios previos a la cumbre del Grupo de las 20 mayores economías del mundo (G-20) en Los Cabos, México, José Manuel Barroso dijo que el vínculo entre los gobiernos con elevado endeudamiento y los bancos en problemas debe ser roto y sugirió que España sería un buen lugar para empezar.

El 9 de junio, la zona euro acordó ofrecerle hasta 100,000 millones de euros (125,000 millones de dólares) a España para recapitalizar sus bancos. El dinero fue a un fondo de rescate bancario del Gobierno.

Los préstamos se sumarán a la deuda soberana española, empeorando la relación entre la deuda del país y su Producto Interno Bruto (PIB) y aumentando los costos financieros del país ibérico. "Lo que esperamos ahora es que España haga su solicitud formal y entonces discutiremos entre los países de la zona euro la mejor manera de hacerlo", dijo Barroso a periodistas.

Comentó que no sabe exactamente qué mecanismos se establecerán para respaldar al sector financiero español, pero agregó que la Comisión favorece una manera que evite que el Gobierno se cargue de más deuda.

"Ciertamente, la Comisión Europea (…) estaría a favor de un sistema que evite hasta donde sea posible cualquier tipo de contaminación entre deudas deuda financiera y deuda soberana, porque creemos que este es uno de los temas que puede tener un impacto negativo en términos de la reacción del mercado", afirmó.

Alemania se opone firmemente a la recapitalización directa por parte de los fondos de rescate de la zona euro, ya que eso finalmente dejaría a los países miembros endeudados en nombre de bancos que cotizan en bolsa. Legalmente, los fondos de rescate son mecanismos de préstamo entre países.

Para hacer lo que Barroso sugiere habría que cambiar los pactos que gobiernan los fondos, tanto el temporal (FEEF) como el permanente Mecanismo Europeo de Estabilidad (MEDE), un proceso que tomaría tiempo y podría causar divisiones.

Barroso dijo que el tema necesita ser discutido entre los ministros de Finanzas de la zona euro, y su equipo indicó que se estaba refiriendo a asuntos de recapitalización de largo plazo, más que a una medida inmediata que podría aplicarse a España en el corto plazo.

Ese tema estará en los focos de discusión en un encuentro de ministros de Finanzas del bloque monetario en Luxemburgo entre el 21 y el 22 de junio. "Aún tenemos que discutir esto en el Eurogrupo, es por eso que sería prematuro de mi parte dar una respuesta definitiva sobre el tema", dijo Barroso.

Se espera que España haga su solicitud formal de ayuda en la reunión de Luxemburgo, aunque cualquier decisión para pedir ayuda podría depender de cómo se entregue. El Gobierno prefiere la recapitalización directa.

Un borrador del comunicado final que debe discutirse entre los miembros del G-20 parecía respaldar la posición de Barroso, con una referencia directa a la necesidad de romper el lazo entre deuda de gobiernos y deuda bancaria.

"Los estados miembros de la zona euro en el G-20 tomarán todas las medidas necesarias para salvaguardar la integridad del área del euro", puede leerse en el borrador obtenido por Reuters, "incluyendo el funcionamiento de los mercados financieros y el rompimiento del 'lazo de retroalimentación' entre soberanos y bancos".