EFE.- El Gobierno canadiense propuso hoy imponer un impuesto de alrededor de 1 dólar canadiense por cada gramo de marihuana vendido cuando el consumo de cannabis sea legalizado en el país, previsiblemente para el próximo año.

La propuesta fiscal presentada hoy por el Gobierno del primer ministro canadiense, Justin Trudeau, podría suponer unos ingresos para las arcas públicas de hasta 1,000 millones de dólares canadienses, unos US$ 790 millones.

El impuesto sería dividido en partes iguales entre el Gobierno federal y las autoridades provinciales.

La propuesta fiscal para la legalización del consumo de marihuana será discutida en diciembre entre el ministro de Finanzas de Canadá y sus homólogos provinciales.

El impuesto supone alrededor del 10% del precio de venta que tendrá la marihuana producida legalmente para su consumo recreativo.

Bill Blair, un antiguo jefe de Policía de Toronto y que ha sido encargado por Trudeau para poner en marcha la legalización del consumo de cannabis con fines recreativos, declaró hoy que la propuesta "ayudará a mantener el cannabis fuera del alcance de jóvenes y los beneficios lejos de las manos criminales".

Los expertos han señalado que con el impuesto propuesto hoy por el Gobierno de Trudeau, el precio de un gramo de marihuana legal será equivalente al precio que existe en la venta ilegal callejera.

Trudeau quiere que el consumo recreativo de la marihuana sea legalizado en Canadá para julio del próximo año, lo que convertirá a la nación norteamericana en el mayor país industrializado donde el cannabis es totalmente legal.

El Gobierno canadiense ya ha presentado un proyecto de ley en el Parlamento del país que está siendo analizado en la Cámara Baja y que posteriormente tendrá que ser aprobado por el Senado.

El proyecto de ley cumple la promesa electoral realizada por Trudeau a finales de 2015, cuando se comprometió a despenalizar el consumo de marihuana para proteger a menores y eliminar una fuente de financiación de organizaciones criminales.

Según un reciente estudio, el mercado del cannabis representará un segmento de 23,000 millones de dólares canadienses (US$ 18,400 millones) cuando sea legal.