La red de teleféricos más grande del mundo se encuentra en La Paz, Bolivia, con un servicio que transporta alrededor de un millón de personas cada día, luego de cinco años de haber sido inaugurados.
Las seis líneas del teleférico (colores azul, blanco, naranja, celeste, morado y café) ubicadas en El Alto tiene a la firma austriaca Doppelmayr como la responsable de una parte significativa del transporte en la capital boliviana, que ahora luce más ordenada gracias al complemento con la red de autobuses públicos.
“Ya estamos en lugares como Bolivia y Colombia, pero vemos una creciente tendencia del uso de teleféricos en Latinoamérica porque son muy prácticos, seguros y ecológicos”, señaló Konstantinos Panagiotou, director de la sede en México de Doppelmayr, luego de firmar, la semana pasada, un contrato por US$ 151 millones para liderar el desarrollo de la Línea 1 del sistema de transporte público CableBús, en Ciudad de México.
“Doppelmayr está lista para llevar su tecnología a más ciudades de América Latina que apuesten a la movilidad por aire”, remarcó el ejecutivo de la compañía austriaca. La mención se refiere a los proyectos que han sido considerados como “pendientes de ejecución” en la región, es el caso del proyecto turístico del teleférico del Centro Histórico de Lima hacia el Cerro San Cristóbal.
San Cristóbal
La Agencia de Promoción de la Inversión Privada (ProInversión) viene trabajando para concretar el proyecto turístico del teleférico del Centro Histórico de Lima hacia el Cerro San Cristóbal.
En ese sentido, ProInversión ha planteado que en diciembre de este año se aprobará el informe de evaluación y se incorporará al proceso de promoción del proyecto. Además, que en marzo del 2020 se emitirá la declaratoria de interés del proyecto.
Al respecto, Viviana Castillo, representante en el Perú de la francesa Poma, operadora de los teleféricos de Medellín en el país del norte y del ubicado en Kuelap, en la región peruana de Amazonas, expresó que este proyecto es icónico para la ciudad de Lima.
“Es una buena señal para el sistema de transporte turístico de Lima que ProInversión le esté dando prioridad a este proyecto. A operadores internacionales como nosotros nos interesa participar en una licitación a futuro”, manifestó la ejecutiva.
Agregó que las características de proyecto turístico del “cableado” entre Lima y el Cerro San Cristóbal hacen que el teleférico sea muy atractivo, considerando lugares como el Paseo de los Descalzos, la Plaza de Acho, y la propia Lima Cuadrada. “Lima se merece un teleférico de esa dimensión”, remarcó.
Otros proyectos
Por su parte, Panagiotou detalló que en el portafolio de proyectos de Doppelmayr en la región figuran el aerotren del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México, el teleférico de las Barrancas del Cobre y el de las grutas de García en Nueva León, todos en el país azteca.
“Ahora mismo estamos haciendo un nuevo teleférico para una firma hotelera que tendrá una extensión de 3.4 km y cinco estaciones”, agregó el ejecutivo de la firma austriaca.
Ante la posibilidad de que los proyectos de teleféricos en la ciudad de Lima se incrementen dado los problemas de transporte público, Castillo citó que también resulta atractivo para Poma la posibilidad de que se concrete la ruta entre los distritos de San Juan de Lurigancho e Independencia.
“Está claro que la solución para el transporte público en Lima es el traslado de pasajeros por cable. Empresas de origen europeo como Poma y Doppelmayr estamos en varios países de la región y seríamos seguros candidatos para participar en estas licitaciones”, manifestó Castillo.
Poma tiene presencia en la región en Telecabina MetroCable Línea J de Medellín, en Colombia; en el teleférico de Orizaba Pulse, en Veracruz, México; y en Brasil en Río de Janeiro (Complejo de Alemao) y Sao Paulo (Materiales Apiai).
Otros posibles participantes para atender los proyectos de teleféricos de la ciudad de Lima, aunque con menos influencia en la región, son la suiza Bartholet y la italiana Leitner.