La principal vía de exportación de los espárragos peruanos era la aérea, pero la pandemia del coronavirus ha implicado un cambio importante en la logística de los envíos. Según el Instituto Peruano del Espárrago y Hortalizas (IPEH), ahora la mitad de los productos se envían por vía marítima y los envíos hacia lugares alejados se han visto limitados.
“En la exportación de espárrago tenemos problemas, porque la mayor parte de los envíos son de espárragos frescos y hay limitaciones en el transporte internacional. Más del 70% de estos envíos van a los Estados Unidos y antes la principal vía eran los vuelos, solo el 10% se realizaba a través de envíos marítimos. Pero los fletes aéreos han subido muchísimo y ahora el 50% de los envíos se hace por vía marítima y el otro 50% mediante vuelos”, explicó el director ejecutivo del IPEH, Carlos Zamorano.
Si bien este cambio en las vías de transporte permite a los exportadores peruanos seguir enviando sus productos a los Estados Unidos, la distancia que separa al Perú de la Unión Europea, su segundo mercado más importante, prácticamente ha imposibilitado el comercio con dicho bloque.
A ello se suman una menor productividad de las plantas de procesamiento de espárragos, puesto que el distanciamiento social implica una reducción del personal operativo; y el cumplimiento de los protocolos de prevención del COVID-19, que incide en el incremento de los costos de producción.
Por ambas razones, las exportaciones de este producto se han reducido alrededor de 15% en lo que va del año, en relación con el mismo periodo del año anterior.
De enero a junio del 2020, los envíos sumaron 20.5 millones de kilos, valorizados en unos US$ 65 millones, en tanto que a lo largo de todo el 2019 habían ascendido a 131 millones de kilos. No obstante, cabe señalar que recién en julio de cada año empieza el periodo de mayor cosecha de este alimento.
Competitividad en EE.UU.
Es sabido que en el 2015 el Perú llegó a ser el mayor productor y exportador de espárragos del mundo, sin embargo las mayores exigencias sanitarias en Estados Unidos frente a temores de ingreso de plagas con este producto incrementaron sus costos y le restaron competitividad. Asimismo, surgieron otros productos como alternativos para su exportación.
Es así que el principal mercado de destino de los espárragos peruanos les exige la aplicación de bromuro de metilo en los puntos de ingreso. Esta exigencia no ha sido impuesta a los envíos procedentes de México, que ya se ha convertido en el principal proveedor de este alimento a los Estados Unidos.
Sin embargo, esta situación cambiaría antes del cierre de año, según estimó Zamorano, gracias a las gestiones que está realizando el Servicio Nacional de Sanidad Agraria (Senasa), en coordinación con el IPEH, para eliminar la aplicación del bromuro de metilo.
“”Si se elimina esta exigencia, habrá un ahorro por fumigación por cada caja, además de un impacto en la competitividad, porque la fumigación le quita alrededor del 30% de la vida del producto. Este elemento nos impide competir con México en igualdad de condiciones y ha permitido que ese país crezca muchísimo y desplace al Perú como principal proveedor de Estados Unidos. Senasa está pidiendo un trato igualitario y confiamos en que este año se elimine la fumigación”, comentó.