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Previo a la presentación del presidente del Consejo de Ministros, Alberto Otárola, ante el pleno del Congreso para pedir el voto de confianza, el Gobierno envió un proyecto de ley al Parlamento solicitando facultades para legislar por 90 días en materia de reactivación económica y modernización de la gestión del Estado.
Son 42 temas en los que el Poder Ejecutivo quiere legislar: siete en materia de inversión pública, cinco en gestión económica, ocho en materia tributaria, 18 en modernización del Estado, dos en contratación pública, uno en tesoro público y uno en catastro fiscal.
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Es precisamente este último tema, el catastro fiscal, el que tiene como objetivo comenzar a solucionar uno de los principales problemas que tiene el sistema tributario peruano: la baja recaudación municipal, especialmente por el Impuesto Predial.
La iniciativa del Gobierno plantea crear y establecer medidas para la conformación, la consolidación y el mantenimiento del catastro fiscal para ser puesto a disposición de las municipalidades.
El catastro fiscal se concibe como un registro cartográfico estandarizado de predios que contiene únicamente información muy básica de estos pero suficiente para fines fiscales.
Esta herramienta no reemplazaría a los catastros municipales, pues se usará solo para fines tributarios, como el establecimiento de la base del impuesto predial, y estará a cargo del Ministerio de Economía y Finanzas (MEF).
En el Perú 1,244 municipalidades (de un total de 1.847) no cuentan con catastro municipal y, por lo tanto, no tienen claridad del número de inmuebles que deben pagar el impuesto predial. En Lima Metropolitana, solo ocho tienen catastros completos y actualizados.
Ampliar la base
El exministro de Economía y Finanzas, Carlos Oliva, explicó que el catastro fiscal permite tener una valoración de los predios que sirve como base para el cálculo del impuesto que debe pagar.
Refirió que esta herramienta también ayudará a identificar zonas en las que las municipalidades no tienen mapeadas la existencia de inmuebles, pero en las que en realidad sí hay construcciones.
“Ayudará a combatir la evasión del impuesto predial, que en teoría no debería existir porque todo debería estar registrado. En la práctica (sin embargo) en nuestro país es muy común que no se tengan los registros”, precisó.
Según Oliva, esta medida debería tener como consecuencia un incremento de la recaudación del impuesto predial, porque habría un mayor control de los inmuebles afectos al tributo.
Paso pendiente
El tributarista Jorge Picón, por su parte, consideró que la creación del catastro fiscal es una buena medida, pues es un primer paso para solucionar la baja recaudación municipal.
Cabe señalar que el Perú posee una de las más bajas recaudaciones del impuesto predial en América Latina, y alcanza apenas el 0.24% del PBI.
Sin embargo, Picón advirtió que uno de los problemas principales que afrontan los municipios para mejorar su recaudación es la falta de una administración tributaria técnica.
“Debería haber una administración tributaria nacional de impuestos municipales con un manejo adecuado y profesional”, precisó.