El prolongado impacto de la inflación, la lenta recuperación del empleo y la débil actividad económica continúa precarizando la calidad de vida del peruano promedio. Esta situación, en parte, ha ocasionado que el 63% de peruanos mencione que sus ingresos no le alcanzan para cubrir sus necesidades y las de su familia, de acuerdo con la última encuesta de Datum Internacional. Es decir, tres de cada cinco están en esta situación.