La electrificación de vehículos, las turbinas eólicas y la transición a fuentes de energía renovables seguirán impulsando la demanda de tierras raras. (Foto referencial: Bloomberg).
La electrificación de vehículos, las turbinas eólicas y la transición a fuentes de energía renovables seguirán impulsando la demanda de tierras raras. (Foto referencial: Bloomberg).

En el desarrollo de su portafolio de proyectos de, Inc. -con oficinas en y participación de la minera - presentó los resultados de un análisis económico preliminar (PEA) del proyecto de arcillas de adsorción de iones Carina Module (). Sin embargo, la apuesta por esos minerales trasciende de dicho activo, incluyendo iniciativas en .

Junto con el desarrollo de los proyectos Carina y Penco (), la minera tiene la intención de identificar y evaluar nuevas oportunidades para aumentar la producción futura de tierras raras pesadas. En ese grupo, se encuentran el (Dy) y (Tb).

“Esto implicará programas de exploración totalmente nuevos y el desarrollo de proyectos adicionales dentro de las concesiones de la compañía en Brasil, Chile y Perú”, indicó la empresa.

Por lo pronto, el PEA del proyecto Carina delineó una iniciativa con un valor actual neto (VAN) después de impuestos de US$ 1,200 millones y una tasa interna de retorno del 29% durante los 17 años de vida útil de la mina. Dicha operación implicaría un capital inicial de US$ 576 millones, con un período de recuperación de 3.6 años

Asimismo, el estudio indicó que dicho yacimiento tendría una producción anual promedio de 208 toneladas de DyTb (disprosio-terbio), lo que representa aproximadamente el 13.7 % de la producción oficial de en 2023. Asimismo, proyectó una producción media anual de 1,190 toneladas de NdPr (neodimio-praseodimio).

De esa manera, la empresa destaca una combinación equilibrada de tierras raras ligeras y pesados en el producto final.

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La demanda de tierras raras

Para, la de vehículos, las turbinas eólicas y la transición a fuentes de seguirán impulsando la demanda de tierras raras, en términos de volumen y, especialmente, de valor. Dichos requerimientos comprenderán principalmente a los elementos utilizados en aleaciones para fabricar imanes permanentes: disprosio, neodimio, praseodimio y terbio.

“El suministro de REE (tierras raras) pesados y limpios, especialmente Dy (disprosio), se ha vuelto problemático porque pocos proyectos apuntan a depósitos de REE pesados. A mediano plazo, el mercado seguirá dependiendo de China y Myanmar para obtener materias primas pesadas de REE”, sostuvo la empresa.

A corto plazo, estimó que los precios promedio de las tierras raras de imanes permanentes sean entre un 15% y un 25% más altos en 2024 que en 2023. A mediano y largo plazo, refirió que las cotizaciones aumentarían de manera constante durante el resto de la década, en función de información de Argus Media.

En particular, proyectó que los precios de Dy seguirán superando al mercado general de tierras raras de imanes permanentes debido a un importante desequilibrio entre oferta y demanda a principios de la década de 2030.

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EL DATO

En octubre de 2021, -que opera minas en Perú- anunció la escisión del 80 % de su negocio de tierras raras, Aclara Resources Inc, así como la cotización en la Bolsa de Valores de Toronto y una oferta pública inicial simultánea que recaudó aproximadamente US$ 98 millones. Hochschild conserva una participación de alrededor de 20 % en Aclara, que tiene un paquete de concesiones minerales en Chile.

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SOBRE EL AUTOR

Bachiller en Comunicación Social (Universidad Nacional Mayor de San Marcos). Trabajé en radio y prensa escrita y, desde el 2013, soy redactor de la sección de Negocios del Diario Gestión.