En el Perú operan –desde hace dos años con la llegada de Viva Air que empezó a funcionar en mayo de 2017 y posteriormente con el arribo de la chilena Sky– el modelo low cost como una alternativa de viajes, que está dinamizando y encarnizando, frente a una lucha frontal de precios, el mercado aerocomercial.
Pero, ¿quiénes aprovechan y desaprovechan esta alternativa de transporte? Las aerolíneas low cost –a diferencias de las tradicionales– brindan pasajes a precios bajo (desde un mínimo de US$ 45 a un máximo de US$ 300), pero con ciertas restricciones en el equipaje. A lo que se añade que se tiene que pagar por servicios (como alimentos, por ejemplo) durante el traslado.
La última encuesta realizada por Global Research Marketing (GRM) a ejecutivos de 25 años a más –en setiembre de 2019– da cuenta del perfil del consumidor de este tipo de transporte (y que mejor lo aprovechan).
La pesquisa realizada en Lima Metropolitana reveló que el 53% lo usa para viajes de turismo, preferente (el 49%) a destinos locales. En cambio el 42% los utilizan para viajes de familia y un 40% para viajes de trabajo.
Solo el 19% lo usa para viajes internacionales. Esto último está relacionado –explicó a Gestión.pe la gerente general de la consultora, Giuliana Reyna– con el costo que genera el uso de un equipaje adicional.
Y es que el 60% de los que acostumbran viajar por este tipo de aerolíneas lleva sólo equipaje de mano (que no implica un pago adicional ya que es permitido por las compañías). Por el contrario, el 19% –de los que usaron la low cost para destinos locales (49%)– pagó por la maleta adicional.
De este porcentaje: el 63% considera que es muy caro y caro el precio de la maleta adicional; mientras que el 34% lo califica como ‘algo caro’ y solo 3% dice que es barato.
Con respecto al precio del pasaje de avión: el 38% de los encuestados suele adquirir pasajes entre US$ 65 a US$ 100; en cambio el 29% compra menos de US$ 65 y 33% superior a los US$ 100.
“Generalmente los que optan por pasajes de menos de US$ 65 lo hacen para viajes cortos, de feriados continuos o mini vacaciones y a destinos nacionales”, aseveró la especialista. (Ver cuadro)
Ante lo cual el atributo más valorado por los viajeros –en su mayoría jóvenes– es el precio (79%). Mientras que el 27% aprecia las promociones y 22% la flexibilidad tarifaria.
Sin embargo, para un 58% las condiciones de las aerolíneas low cost no están claras frente a un 42% que considera que las condiciones sí están claras. (Ver cuadro)
“Esto básicamente esto se da debido que todavía –pese a que las aerolíneas low cost están operando en Perú desde hace dos años– los consumidores no tienen muy claro cuáles son las aerolíneas bajo el formato de bajo costo y las reglas que imponen”, indicó la gerenta de GRM.
Ello se denota al preguntar a los encuestados sobre las líneas low cost de mayor recordación: 70% identifica a Viva Air; el 52% a Sky y el 34% a Latam, cuando esta última no opera propiamente bajo el formato de ‘bajo costo’. Incluso el 26% considera a Peruvian como low cost, cuando tampoco funcionaba bajo esta modalidad. (Ver cuadro)
“A las aerolíneas low cost les hace falta diferenciarse de tal manera que el consumidor pueda tener en claro cuál es una línea aérea low cost y cuál es la convencional porque está asumiendo las promociones o tarifas flexibles como una empresa de ‘bajo costo’. Ello también implica un mejor mecanismo de difusión de las reglas que impone –como los pagos adicionales por maletas, tickets de avión, comida a bordo, entre otros– para evitar la percepción de estafa o engaño”, acotó Giuliana Reyna.
-Lo que los dejan pasar-
Para la gerenta de Global Research Marketing (GRM) un consumidor que no está aprovechando plenamente las ventajas que puede ofrecer –sobre todo para los viajes cortos y a destinos nacionales– el transporte aéreo en este tipo de formato son los adultos mayores.
“Actualmente, la comunicación (de estas empresas) está dirigida a un público joven y más millennials, por lo que habría que acercar o dirigir la comunicación a un segmento más de adulto mayor que tiene un presupuesto interesante –de sus propios ahorros y de su jubilación– y que tienen mucho interés por viajar”, manifestó la especialista.
Añadió que este segmento no apunta a las líneas aéreas de bajo costo debido a que no entienden las condiciones que imponen.
“Ellos (los adultos mayores) están gastando (en sus viajes) entre US$ 75 y US$ 100 en una ruta nacional, en promedio. No obstante, pueden suponer que esta tarifa incluye el derecho al equipaje o la alimentación, por lo que existe cierta frustración cuando no es así. Por eso es vital mejorar la política de comunicación en estas empresas para que sea absolutamente claro hacia el consumidor lo que ofrecen y las restricciones que imponen", afirmó.
La encuesta también revela que apenas el 19% de los que utilizan las low cost lo usan para viajes internacionales, lo que implica –en opinión de Reyna– una oportunidad para promover su uso hacia destinos foráneos, apelando al bajo precio.
Dato: El 23% considera a Viva Air como la mejor aerolínea low cost; 12% a Sky; 10% a Peruvian Airlines y 7% a Latam. (Ver cuadro)