Maluplast pisa Panamá y planea culminar su segunda planta en Chilca

Así lo manifestó el gerente comercial de la empresa, Rolando Rodríguez, quien señaló que se encuentran en negociaciones para llegar a Ecuador, Chile, Colombia y Argentina. “Estamos adaptándonos a los requisitos que piden cada uno de los países”, añadió el ejecutivo.

El objetivo de la firma es llegar a estos mercados con su línea de fabricación propia, como son las bolsas de basura. Las bolsas Superbag se fabrican en su planta de Puente Piedra. Además, tienen las líneas de esponjas, paños, escobas y trapeadores que son importadas de países de Asia y Brasil.

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Mercado local

Cerca del 65% de los ingresos de Maluplast provienen de su canal moderno, integrado por el abastecimiento de su marca de bolsas Superbag a tiendas de conveniencia y firmas como Cencosud, Sodimac, Supermercados Peruanos. Además, también efectúa la maquila de este producto.

No obstante, de cara al 2024, la firma apunta a fortalecer su venta en el canal tradicional, donde reconoce que existe una alta informalidad. “Estamos por cerrar alianzas con socios estratégicos que refuercen la distribución en el mercado nacional y regional”, sostuvo el representante.

A cierre de año, Rodríguez dijo que la meta es que el canal tradicional transite de un 10% a un 15%.

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Nueva planta

Otro de los proyectos que Maluplast proyecta culminar este 2024 su segunda planta, situada en Chilca (Cañete). A partir de su puesta en marcha, el vocero señaló que se espera pasar del procesamiento de 180 toneladas de plástico reciclado mensuales (en su planta de Puente Piedra) a 300 toneladas al mes.

La inversión para dicha planta ha sido de aproximadamente US$ 1 millón, considerándose la adquisición del terreno, la implementación del lugar y el equipamiento.

Asimismo, Rodríguez manifestó que la firma también contempla la producción de su propio insumo, lo cual le permitiría ahorrar hasta un 20% en costos. Sostuvo que a la empresa le interesa la trazabilidad de todo el material recolectado, el cual es materia prima para la producción.

“Trabajamos con una resina 100% reciclada, la cual es comprada localmente; somos muy exigentes con nuestros proveedores por temas de calidad. El fabricar nuestro propio insumo es un negocio al que tenemos que ingresar, trabajando de la mano con los recolectores de plástico de primer uso y con las grandes fábricas de plásticos. Tenemos que lavar el plástico para procesar y volverlo a convertir en materia prima; sin embargo, para que todo eso se haga, necesitamos de licencias sanitarias y trámites en los que estamos trabajando”, expresó.

Rodríguez estimó que al cierre de este año, el proyecto sería viable, con una inversión aproximada de US$ 200,000.

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SOBRE EL AUTOR

Mayumi García

Bachiller en Comunicación Social de la Universidad Nacional del Santa. Con 11 años de experiencia profesional en comunicación escrita y digital. Trabaja en el Diario Gestión desde noviembre del 2021. Laboró anteriormente en la Sociedad Nacional de Industrias y el diario La Industria de Chimbote.