Inditex
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El grupo textil español Inditex, propietario de la marca Zara, anunció que impulsará su estrategia de venta por internet tras acusar una elevada pérdida en el primer trimestre, la primera en casi 20 años, a causa de la pandemia de COVID-19.

sufrió en el primer trimestre, del 1 de febrero al 30 de abril, una pérdida neta de 409 millones de euros (US$ 463 millones), cuando en el mismo período del 2019 había tenido un beneficio de 734 millones de euros.

Es la primera pérdida desde su entrada en Bolsa en el año 2001.

Un dato extraordinario, y es que la crisis sanitaria “tuvo un impacto material en nuestras operaciones a causa de los confinamientos y las restricciones impuestas en la mayoría de mercados”, declaró el presidente del grupo, , en una conferencia para analistas.

La pérdida incluye una provisión de 308 millones de euros destinada al programa de transformación de tiendas, iniciado antes de la actual crisis.

La facturación se desplomó a su vez 44%, a 3,303 millones de euros, ya que en el momento más duro de los confinamientos a lo largo y ancho del mundo el grupo tuvo que cerrar un 88% de las tiendas de sus ocho marcas, entre ellas Zara, Massimo Dutti, Bershka, Oysho o Stradivarius.

En cambio, las ventas por internet, que aportaron un 14% del volumen de negocio el año pasado, aumentaron un 50% en el primer trimestre, y un 95% en el mes de abril.

En una nota, los analistas de Bankinter lo atribuyeron a que los resultados muestran un “impacto severo pero temporal del coronavirus”.

El grupo mantiene los objetivos de crecimiento de las ventas de 4% a 6% a largo plazo, y la solidez del modelo se demuestra con una sólida posición de caja, el recorte de los costes operativos de 21% y el crecimiento de las ventas online de 50% en el trimestre”, añadió Bankinter.

Minoristas en linea

Los cierres por la creó un auge para los minoristas en línea, con clientes atrapados en sus hogares exigiendo todo, desde restaurantes y entrega de alimentos hasta flores frescas y cócteles premezclados. A medida que el Reino Unido sigue a otras partes del mundo en la reapertura de tiendas no esenciales, las empresas de comercio electrónico apuestan a que el cambio a la web se mantendrá.

Los clientes que anteriormente habían sido reacios a comprar en línea se vieron obligados a probarlo después de que las tiendas y restaurantes cerraron en marzo para contener la pandemia. Las ventas en línea en el Reino Unido como proporción de todas las ventas minoristas alcanzaron un récord de 33.4% en mayo, dijo la Oficina de Estadísticas Nacionales.

Al menos parte de ese negocio permanecerá, potencialmente a costa de las tiendas físicas que ya estaban luchando para competir contra los clientes que cada vez prefieren comprar en línea. Los compradores mayores que intentan minimizar su exposición a Covid-19 evitando las multitudes, continúan trabajando en casa y la aversión a las largas colas deben hacer que sigan llegando los clics.

“Ha habido un aumento en la cantidad de personas que compran en línea por primera vez y, dado que tienden a ser grupos demográficos de más edad que tienen mayor riesgo de covid, y por tanto, es más probable que desconfíen de los lugares concurridos, se puede esperar que continúe esa tendencia”, dijo Andy Mulcahy, director de estrategia e información para la asociación de la industria IMRG.