El plan dará mayor margen a la compañía para hacer frente a sus acreedores en medio de las restricciones a los vuelos internacionales debido a la pandemia. (Foto: Nicolas Economou / NurPhoto / Getty Images).
El plan dará mayor margen a la compañía para hacer frente a sus acreedores en medio de las restricciones a los vuelos internacionales debido a la pandemia. (Foto: Nicolas Economou / NurPhoto / Getty Images).

La aerolínea estatal tailandesa Thai Airways, que acumula una deuda de unos US$ 9,300 millones, se someterá a un plan de reestructuración para evitar la quiebra en medio de la pandemia del COVID-19, indicó el primer ministro tailandés, Prayut Chan-ocha.

Prayut afirmó que el gobierno decidió poner la aerolínea bajo la supervisión de un tribunal de quiebras, tras descartar declarar la bancarrota o aprobar un rescate con dinero público.

El mandatario precisó que un grupo de expertos nombrados por el tribunal diseñarán el plan con el objetivo de evitar la bancarrota y el despido de los 20,000 empleados de la aerolínea, que el pasado marzo cumplió 60 años.

El plan dará mayor margen a la compañía para hacer frente a sus acreedores en medio de las restricciones a los vuelos internacionales debido a la pandemia.

Ha sido una decisión difícil, pero sé que protegerá los intereses del país y de los ciudadanos”, dijo Prayut, quien precisó que las autoridades no destinarán fondos a Thai Airways al tener que concentrarse en ayudar a los ciudadanos afectados por el nuevo coronavirus.

Espero, lo mismo que todos los tailandeses, que ayudando a Thai Airways con el plan de reestructuración bajo la supervisión del tribunal, la aerolínea volverá robusta”, agregó el jefe del Ejecutivo.

Thai Airways, que cuenta con una flota de 80 aviones, acumula alrededor de 300,000 millones de bat de deuda (unos US$ 9,360 millones u 8,650 millones de euros).

Parte de los préstamos vencían a finales de mayo, pero debido al parón de la actividad por la pandemia del COVID-19 la compañía no podrá hacer frente a los compromisos de pago.

Tailandia ha extendido hasta finales de junio la suspensión de llegadas de vuelos comerciales procedentes del extranjero con el objetivo de frenar la propagación del virus, que dentro del país ha infectado a 3,033 personas, incluidos 56 muertos.

La crisis económica a raíz de la pandemia del COVID-19 ha aumentado la presión sobre las finanzas de Thai Airways, que acumula pérdidas desde hace años y cuyas acciones controla en su mayoría el ministerio tailandés de Finanzas.