Jerome Powell, presidente de la FED. (Foto: Reuters)
Jerome Powell, presidente de la FED. (Foto: Reuters)

La de Estados Unidos (Fed) mantuvo el miércoles sus principales tasas de interés pero dijo que pondrá el ojo en vigilar la inflación y los acontecimientos económicos mundiales.

La decisión fue una señal de que los miembros de la entidad, que reiteradamente dijeron que cambiarían de rumbo de ser necesario, están monitoreando el enlentecimiento económico mundial y la persistente falta de presiones sobre los precios, lo cual abre la puerta a nuevos movimientos de las tasas.

En su última reunión del 2019, el comité de política monetaria de la Fed (FOMC) mantuvo las tasas, tal como se esperaba, en un rango de entre 1.5% y 1.75% fijado tras el tercer recorte del año decidido en octubre.

La decisión fue tomada esta vez por unanimidad tras varias reuniones del FOMC en la que uno o varios de sus integrantes estuvieron en desacuerdo con la mayoría.

Es improbable que el mantenimiento de las tasas satisfaga al presidente Donald Trump quien reiteradamente ha presionado a la Fed y a su jefe para que las lleve a cero para de esa forma inyectar más estímulos a la economía.

Trump sostiene que Estados Unidos está en desventaja contra economías extranjeras que tienen tasas más bajas y hasta negativas.

Antes de la reunión, Powell y otros miembros de la Fed indicaron claramente que quieren hacer una pausa en los recortes hasta ver los efectos que tuvieron los estímulos ya dispuestos en el correr del año.

Empero en un cambio de tono en su comunicado, el FOMC dijo que integrantes del organismo "seguirán monitoreando las implicaciones de las nuevas informaciones sobre las perspectivas económicas; incluyendo acontecimientos globales y las nulas presiones inflacionarias".

El comunicado advierte que a pesar del sólido nivel del gasto de los hogares, la confianza de las empresas y de los exportadores sigue siendo débil.