La de julio estaría próxima a 0.45%, según cálculos del banco Scotiabank, con lo cual su trayectoria interanual pasaría de 1.4% a 1.7%, continuando con su recuperación rumbo al punto medio del rango objetivo (2%).


Julio es un mes en el cual una inflación más alta es previsible, dados los factores estacionales de pago de gratificaciones y gastos vinculados con Fiestas Patrias, informó el analista senior del Departamento de Estudios Económicos del Scotiabank, Mario Guerrero.

Inflación meses de julio. (Fuente: Scotiabank)
Inflación meses de julio. (Fuente: Scotiabank)


En este sentido, se observaron alzas temporales en las tarifas de transporte aéreo y transporte interprovincial; y adicionalmente, habría influido el alza de tarifas eléctricas anunciada por el Osinergmin (de 1.6% para clientes residenciales).


Las alzas de los precios de los combustibles realizadas durante las últimas dos semanas, no se reflejarían en la inflación de julio, sino probablemente en la de agosto, debido a la metodología de precios promedio que se utiliza para calcular el Índice de Precios al Consumidor (IPC), indicó.


Un efecto inverso se registró en el precio del balón de gas, que subió más de 2% en promedio, haciéndose visible el incremento correspondiente a fines de junio por el reajuste del Fondo de Estabilización de Precios de Combustibles.


Los precios de los alimentos registraron alzas moderadas, liderados por hortalizas (como vainita, tomate, cebolla, haba verde) y frutas (limón, mango, melón). Los precios de los productos avícolas registraron alzas moderadas.


Las modificaciones al Impuesto Selectivo al Consumo (ISC) habrían tenido un impacto ya marginal, tras tres meses de aplicación. Algo similar habría ocurrido con la reducción de las tarifas de telefonía fija local y telefonía internacional anunciadas por Osiptel en junio, cuyo efecto rezagado, se habría reflejado marginalmente en julio.


El ritmo de inflación anual (1.7%) se mantendría dentro del rango meta (entre 1% y 3%) por segundo mes consecutivo. En una medida más ácida, la inflación sin alimentos, ni energía, ni modificaciones del ISC, se habría mantenido estable en julio, por cuarto mes consecutivo.


Agosto
“Para agosto prevemos un retroceso en la trayectoria de la inflación, probablemente a un ritmo de 1.1%, debido a una alta base de comparación (0.67% en agosto del 2017), para a partir de setiembre continuar con su trayectoria previa. Mantenemos nuestra proyección de 2% para fin de año”, señaló Guerrero.


Con la inflación observada en el rango meta, expectativas de inflación estables y una recuperación económica más visible y generalizada es probable que la política monetaria mantenga su orientación actual, con una tasa de referencia en 2.75%, al menos hasta fines de año, indicó.

Inflación observada y estructural. (Fuente: Scotiabank)
Inflación observada y estructural. (Fuente: Scotiabank)


No siendo la inflación un problema, el foco de la autoridad monetaria estará en continuar monitoreando la mayor volatilidad financiera asociada a las tensiones comerciales entre Estados Unidos y China.


Medidas del BCR

Por lo pronto, el Banco Central de Reserva (BCR) ha reducido el encaje en moneda extranjera a 35% a partir de julio y ha flexibilizado los límites de las operaciones pactadas de venta de moneda extranjera a moneda nacional a través de forwards y swaps.


A ello se añade el aumento del límite de inversión en el exterior para los fondos de pensiones de 49% a 49.5% a partir de agosto y a 50% a partir de setiembre, con lo cual el límite operativo alcanzará el límite legal. Nuevos aumentos, por encima de este límite, tendrán que contar con la modificación previa del límite legal por parte del Congreso.


Con la reciente modificación, los fondos de pensiones dispondrán de hasta US$ 480 millones para una mayor diversificación de sus inversiones, moderando al mismo tiempo el exceso de oferta en el mercado cambiario.


El crédito al sector privado en moneda extranjera registró un ritmo de crecimiento de 9.9% a fines del 2017 y en lo que va del año ha venido desacelerando hasta un ritmo de 8.4% en junio de este año.


Por el contrario, los depósitos en moneda extranjera se han venido acelerando desde un ritmo de 5.7% a fines del 2017 a 9.6% a junio de este año.