La economía peruana caería a una tasa de dos dígitos este año, como resultado del impacto de la crisis sanitaria y de las medidas para contrarrestarla. Según la proyección de Macroconsult, el PBI se contraerá 12% al cierre del 2020, ¿cuáles son las consecuencias de este deterioro en la economía familiar?
La precarización del empleo (ver página 3) y los menores ingresos son resultado -en parte- del impacto de la pandemia, por ejemplo en Lima Metropolitana. “Hay tres mundos, el del formal dependiente, el informal dependiente y el independiente. Los tres han perdido empleo, se ven las cifras en Lima; pero los independientes y los informales dependientes han perdido más salarios”, señaló Elmer Cuba, socio de Macroconsult.
En la capital, los salarios en setiembre, respecto a similar mes del 2019, se contrajeron 12.5%, explicado sobre todo por la caída de ingresos de los independientes (-34.3%); en tanto, para los dependientes, casi se han mantenido los salarios (-1.3%). En valores absolutos, en diciembre del 2019, los independientes tenían ingresos por S/ 1,608 (promedio mensual), y ahora están en S/ 1,042; pero los dependientes registran salarios en torno a S/ 1,800.
“Hacia adelante, se espera que la situación se mantenga así por un buen tiempo y se empezaría a recuperar el empleo informal para absorber a los independientes y de alguna manera al formal que perdió empleo”, agregó.
Cuba proyectó que la informalidad pasaría de 70% al cierre del 2019, a 75% en este año. “Pero hay que recordar que la informalidad es de trabajadores dependientes, no existe el independiente informal, en el sentido laboral me refiero”, remarcó.
Desde el lado del empleo en Lima Metropolitana, este se ha reducido respecto al cierre del 2019 (ver gráfico); pero, según la “calidad” de los puestos de trabajo, el subempleo viene creciendo interanual desde agosto (10.3%) e incluso se aceleró en setiembre (17.9%).
La economía
Macroconsult estimó que la caída de la economía continuó desacelerándose. El PBI se habría contraído 7% en setiembre; y en octubre retrocedería en torno al 5%, explicado por cuatro factores: inicio parcial de la fase 4; el impacto de un día laboral adicional (se suspendió el feriado del 8 de octubre); el otorgamiento del segundo bono universal, y reactivación de la inversión pública.
“La mejora es cada vez menor porque comparas con meses en los que habían fases de reanudación, eso ya se terminó. Ahora ya estamos en manos de lo que pueda hacer la política fiscal. La política monetaria ha sido muy poderosa para evitar que esto sea un colapso, que se rompa la cadena de pagos, pero esto tiene un límite, por eso lo que toca es política fiscal”, dijo. Por ejemplo, la inversión pública crecería el último trimestre, aunque caería al cierre de este año.
Desde el lado privado, las expectativas empresariales de largo plazo (a 12 meses) ya están en niveles prepandemia, pero los indicadores de contratación e inversión todavía están en área neutral o ligeramente optimista.
Para el economista, las expectativas para invertir y contratar “van a demorar en reaccionar” porque existe un factor de riesgo como son las elecciones del 2021. Cuba aclaró que esto no afecta a inversiones que apuntan al exterior: minería y agroexportación.
El verano
La consultora se encuentra revisando sus cifras, pero Cuba adelantó que en enero y febrero del 2021 aún se registrarían ligeras caídas, y en marzo habría un fuerte rebote, lo que llevaría a que la economía crezca en el verano.
Demanda eléctrica podría dejar de caer en octubre
La demanda eléctrica podría alejarse finalmente de terreno negativo: al 25 de octubre, la contracción registrada fue de solo 0.3% y al cierre de este mes se espera que deje de caer (en torno a 0%), según proyectó Diego Díaz, economista senior de Macroconsult.
“El salto principal en las últimas dos semanas ha estado en el consumo de ciudades -sin grandes usuarios-, esto por la “fase 3.5” y la reactivación en algunas zonas del país”, refirió. Cuando se analiza por zonas, en el norte viene creciendo a tasas superiores al 5%. De hecho, la última semana se incrementó en 12%, sobre todo en Piura y La libertad. En el centro, el consumo está avanzando un poco más lento porque “Lima es un barco bien pesado de mover”, y el sur sigue cayendo, pero en menor medida.
Economía caería 13.7% este año
Thorne & Associates ajustó al alza su proyección de crecimiento para el 2020, desde -17% a -13.7%. Ahora espera una menor caída para el consumo total (-9.3%) por una mejora en la proyección del consumo privado: desde -15.1% a -11.7%. Además, prevé que la inversión bruta fija se contraería 35.7%, donde la privada retrocedería 37.3% y la pública 29.3%.
En la misma línea, Intéligo SAB proyectó que la inversión pública retrocedería alrededor de 30% en el año. En detalle, solo en el cuarto trimestre, se contraería 30%.
Thorne & Associates elevó su estimado de crecimiento del PBI desde 6.8% a 11.1%, explicado por una mejora en la demanda interna (9.6%) y la inversión bruta fija (23.9%).