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En el océano Pacífico central se mantiene la probabilidad de ocurrencia de El Niño global, que afectaría al Perú, y que incrementa los riesgos agroclimáticos, entre ellos, para los principales cultivos de la campaña agrícola que se inició en agosto.
Así lo informó el presidente del Senamhi, Guillermo Baigorria, quien indicó que, según los pronósticos de esa entidad, hasta noviembre, se mantendrán las anomalías climáticas extremas.
Es decir, anotó, acumulados de nubosidad que pueden llevar a la ocurrencia de lluvias sobre lo normal en la costa norte, y por el contrario, por debajo de lo normal en la sierra norte, centro y sur, así como selva norte.
Confirmó que ya la ausencia de lluvias es una situación preocupante sobre todo para la actividad agropecuaria en el sur.
Se puede agudizar la sequía
Refirió que, con la llegada de El Niño Global, se puede agudizar la ocurrencia de la sequía actual, pero, además crear condiciones para una presencia aún mayor de plagas y enfermedades fitosanitarias que atacan a los cultivos.
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Hasta ahora, según el Senasa, había al menos cinco plagas que podían afectar cultivos, como son el ántrax, la roya amarilla, la langosta, roedores y la mosca de la fruta, que podían atacar a la papa, el maíz, el café y árboles frutales.
No obstante, el presidente del Senamhi dio a conocer una relación de al menos 28 plagas que pueden amenazar los principales cultivos, como son el arroz, la papa, el maíz amarillo duro, el maíz amiláceo.
Amenazas para el arroz
En el caso del arroz (que es el principal cultivo), indicó que, en la costa norte, entre agosto y noviembre las condiciones del clima propiciarían el avance de la campaña, pero a su vez es probable una mayor incidencia de plagas asociadas a la alta humedad.
Esas condiciones descritas, según refiere, propician condiciones favorables para plagas como la sogata, el tagosodes, la disicola, que pueden transmitir el virus de la hoja blanca; así como el gusano rojo, la plaga del chironomus, y la mosca minadora del arroz.
Estos, advierte, pueden afectar a las plantas en desarrollo, así como provocar la reducción del macollamiento, lo que traería retrasos en la maduración de los sembríos arroceros.
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Diez plagas para la papa
En cuanto a la papa (el segundo producto más sembrado en el país), indicó que podría ser atacada hasta por diez plagas, de las cuales identificó que siete podrían presentarse en la costa central y sur, atraídas por la persistencia de temperaturas sobre lo normal.
Entre ellas mencionó a la mosquilla del brote, la prodiplosis longfila, la mosca blanca, la bermisia tabasi, el ácaro blanco, entre otras.
En algunas zonas de la sierra central y sur, las altas temperaturas pueden atraer a los gorgojos de los andes, que dañan los tubérculos, o la pulguilla de la papa, que ataca el follaje.
Amenazas para el maíz
Refirió que otras siete plagas pueden dañar los sembríos de maíz amarillo duro en la costa y selva norte, como los gusanos cortadores, la feltia experta, el agrotis ipsylón, o la copitarsia sp, el gusano picador, o el elasmopalpus lignosellus, que perfora la planta y la destruye en su punto de crecimiento, provocando su marchitez y muerte.
Otras cuatro plagas, anotó Baigorria, podrían afectar a su vez los sembríos de maíz amiláceo, como el gusano cogollero, los gusanos cortadores, entre otros, que pueden causar daño en las fases iniciales del cultivo.
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¿Estamos preparados?
Según el experto en agroclimatología, Ulises Osorio, en el Perú y otros países ya se ha detectado también la presencia de la plaga del trips, que es un mosquito muy pequeño que puede dañar diversos cultivos, entre ellos los arándanos.
Explicó que los sembríos en general, al detectar condiciones de estrés hídrico, (sequía) generan una hormona que atrae a los insectos y otras plagas, que pueden mermar la producción de los sembríos en esta campaña.
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Sin embargo, advirtió que, ante la oleada de éstos elementos dañinos para los cultivos, ni los pequeños productores que atienden a cultivo para consumo interno, ni entidades públicas relacionadas al agro están preparados.
En el caso de los productores de arándanos y otros productos para exportación, indicó que ya están tomando medidas, pero en el caso de los que atienden el mercado nacional, están incrementando el uso de plaguicidas al no obtener resultados iniciales en contener el avance de los parásitos.
Por el lado estatal, indicó que las agencias agrarias de los gobiernos regionales, carecen del personal suficiente ni la capacidad para aplicar planes de manejo integrado para prevenir daños causados por estas plagas.