MEF: pandemia lleva a la clase media a una “pobreza temporal”

El Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) consideró que hay espacio suficiente para reducir la tasas de informalidad laboral tomando en cuenta que somos uno de los pocos países con ingresos medios altos que tiene la mayor tasa de informalidad laboral, después de Nicaragua y Ecuador.

“La meta es poder llegar en los siguientes años -no es una tarea fácil- a niveles de países de como Chile y Uruguay cuya tasa de informalidad laboral es de 28% y 24%, respectivamente”, dijo el director general de Política Macroeconómica y Descentralización Fiscal del MEF, Alex Contreras.

En ese sentido, el funcionario dijo que -en los últimos 20 años- Perú ha sido uno de los países que ha podido consolidar su clase media.

“No obstante, entre el 75% y 80% de la población peruana pertenece a este sector social, pero la mitad es clase media vulnerable por lo que ante un shock o elemento externo que afecte sus ingresos son ciudadanos que pueden volver a la pobreza”, acotó durante su participación en el evento Perú Sostenible organizado por Perú 2021.

Agregó que el COVID-19 ha generado un retroceso de la familias de clase media hacia la pobreza, “pero que va ser temporal”.

“Con el crecimiento de los siguientes años veríamos una recuperación de la clase media. Hay que entender que la informalidad es heterogénea a nivel nacional ya que hay regiones con mayor informalidad como son Huancavelica y Puno por lo que tienen menores niveles de competitividad, mientras que Ica y Moquegua son las más competitivas al registrar menores niveles de informalidad”, detalló.

“Para crear mejores condiciones para los trabajadores necesitamos entender las condiciones propios de cada región, por lo que la estrategia del gobierno está relacionada a impulsar la formalización laboral, pero desde una perspectiva con un enfoque territorial”, añadió.

El representante del MEF dijo que -además de la informalidad- hay otras brechas que se tienen que resolver e incluirlo en la agenda de corto plazo como la baja inclusión financiera, el cierre de brechas de infraestructura estimada en S/ 117,000 millones. También está la brecha de digitalización y social y por último mejorar la calidad de los servicios públicos.

Ante ello precisó que la agenda del MEF es tripartita teniendo como primer objetivo salir de la crisis. “La meta de corto plazo es la de registrar tasas positivas de crecimiento, converger al potencial, recuperarnos a nivel preCOVID y tratar de continuar con la tendencia que nos ha permitido en los últimos 20 años ser uno de los países de mayor crecimiento de la región”.

A reglón seguido, sostuvo que la agenda tripartitica también implica no descuidar el largo plazo. “En los últimos dos años hemos dejado de lado de mirar esta rutina de mirar el corto plazo para enfocarnos en el largo plazo con lo cual se ha dado un impulso a la inversión privada con el Plan Nacional de Infraestructura y la reinvención de ProInversíón”.

Añadió que en materia de cerrar la brecha de infraestructura hay una ‘agenda activa’. “De los 52 proyectos incluidos en el Plan Nacional de Infraestructura, 32 se encuentran en fase de ejecución, 17 en proceso y tres en idea”.

Igualmente dijo que para cerrar las brecha, desde el gobierno se viene implementado el Plan Nacional de Competitividad y Productividad, que busca solucionar los principales problemas estructurales para poder crecer a altas tasas y generar un crecimiento sostenido e inclusivo. “Actualmente tiene un avance de 19.3%”.

-Materia laboral-

Contreras dijo que como parte del Plan Nacional de Competitividad y Productividad se está trabajando -de la mano con el Ministerio de Trabajo- en mejorar el marco normativo para articular la oferta laboral con la demanda.

“Se está trabajando en el marco normativo de todo el proceso, desde que se forma el trabajador hasta que llega al mercado laboral por lo que se esta trabajando en las modalidades formativas, en al modernización del servicio nacional del empleo y en los sistema de inspección laboral. Con el Minedu se está trabajando en la pertinencia de los programas formativos, en la certificación de competencias y habilidades”.

Igualmente, se está trabajando en mejorar las condiciones regulatorias ya que “hay demasiadas restricciones y burocracia” para converger a la digitalización de los servicios para acercar más al Estado con las empresas.