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Lima (Reuters).- La moneda peruana cerró estable el lunes debido a que una nueva intervención oficial absorbió las ventas de dólares de bancos, empresas e inversores institucionales en la plaza local.
El sol se depreció marginalmente un 0.04% a 2.641/2.643 unidades por dólar, frente a las 2.641/2.642 soles por dólar del viernes, con negocios por 453 millones de dólares.
Luego de dos sesiones sin participar en el mercado cambiario, el Banco Central compró el lunes 68 millones de dólares a un tipo de cambio promedio de 2.6389 unidades, con lo que sus adquisiciones se elevaron a 8,055 millones de dólares en lo que va del año. Con el resultado de la jornada, la moneda peruana registra un avance del 2% en lo que va del año.
El Banco Central intervino en la jornada porque el "mayor valor de los dólares en términos de tasas de interés en el mercado local no fue suficiente para evitar que los bancos terminen revendiendo el exceso de los dólares", dijo un operador del mercado de la mesa de dinero de un banco local.
Para frenar una brusca apreciación en la moneda peruana, el Banco Central elevó la semana pasada las tasas de encaje promedio para los depósitos en moneda nacional y extranjera.
Con el alza del encaje , la autoridad monetaria busca actuar de manera preventiva para atenuar el ritmo de expansión de la liquidez en un contexto de acelerada desdolarización de los depósitos locales, así como de un mayor endeudamiento en dólares de las empresas y bajas tasas de interés en moneda extranjera.
Sin embargo, un ajuste de posiciones de los bancos, así como las ventas de dólares de empresas y de inversores institucionales, apuntalaron al sol hasta las 2.636/2.637 unidades por dólar durante la jornada. La moneda peruana se llegó a transar hasta las 2.636 unidades por dólar.
"Aún es muy chica la diferencia a favor del dólar en términos de tasas y la oferta estructural sigue llegando, lo que hace que la presión siga siendo a la baja del tipo de cambio(dólar)", explicó una fuente del sistema financiero.
La moneda peruana registra una tendencia al alza ante los buenos fundamentos de la economía local, que a su vez ha impulsado a los bancos a recortar progresivamente sus posiciones estructurales en la divisa estadounidense.
A nivel global, los mercados externos eran presa de una mayor aversión al riesgo ante los renovados temores sobre la crisis de deuda en la zona euro luego del triunfo de partidos anti-austeridad en las elecciones en Francia y Grecia.
En ese escenario, el índice dólar que mide el desempeño del billete verde frente a una cesta de monedas, subía un 0.13%.
La moneda local en el mercado paralelo operaba en las 2.633/2.635 unidades por dólar, mientras que el Banco Central inició la jornada con una liquidez de 14,350 millones de dólares.