FAO
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La FAO también advirtió que había recortado su pronóstico de una abundante producción global de cereales en el 2019 por la caída prevista en la cosecha de maíz de Estados Unidos, cuyas zonas de cultivo están afectadas por inundaciones.

El índice de precios de la FAO, que mide las variaciones mensuales para una canasta de cereales, oleaginosas, productos lácteos, carnes y azúcar, promedió 172.4 puntos el mes pasado. La lectura de abril fue de 170.3 unidades, el nivel más alto desde junio pasado.

El índice de precios lácteos de la FAO subió 5.2% respecto del valor de abril a un máximo de cinco años, y el queso ayudó a elevar el índice gracias a la fuerte demanda mundial del producto.

El índice de precios de los cereales de subió 1.4% debido. El índice de azúcar bajó 3.2% para el mes y el índice de precios de vegetales cedió 1.1%.

En su segundo pronóstico para el 2019, la FAO anticipó que la producción mundial de cereales sería de 2,685 millones de toneladas. La cifra es menor que la expectativa previa de 2,722 millones de toneladas pero supera en 1.2% los niveles del 2018, cuando la producción disminuyó.

"El aumento interanual en la producción mundial de cereales refleja las expansiones de la producción de trigo y cebada, mientras que la producción mundial de arroz probablemente se mantendrá cerca del nivel récord del año pasado", dijo la FAO.

"Sin embargo, ahora se considera que la producción mundial de maíz se reducirá, y se espera que la producción estadounidense disminuya un 10% con respecto al año anterior, con un ritmo muy reducido de plantaciones debido a condiciones climáticas desfavorables".

La agencia de la ONU dijo que las nuevas estimaciones de producción y utilización sugirieron que las existencias mundiales de cereales podrían disminuir hasta en 3% en el nuevo ciclo, cayendo a un mínimo de cuatro años de 830 millones de toneladas.