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Los inversores están en modo “totalmente alcista”, inyectando más dinero en mercados emergentes, acciones de pequeña capitalización y el sector bancario con la esperanza de que una vacuna contra el COVID-19 impulse a estos sectores afectados, mostró la encuesta mensual de inversores de Bank of America (BofA).
Las acciones mundiales tocaron un nuevo récord el lunes, después de que Moderna anunció positivos datos para una posible vacuna contra el COVID-19, siguiendo datos igualmente optimistas de su rival Pfizer. Los inversores encuestados por BofA esperan una “vacuna creíble” para enero.
La euforia hizo que los niveles de efectivo de los inversores cayeran al 4.1% en noviembre, frente al 4.4% del mes pasado, hasta niveles anteriores al COVID-19, vistos por última vez en enero, según la encuesta a 190 gestores de fondos con US$ 526,000 millones en activos bajo gestión.
En un momento en que las expectativas de crecimiento económico mundial y de ganancias rondan máximos de 20 años entre los inversores encuestados, es probable que la “rotación de reapertura” en sectores comerciales sobrevendidos continúe en el cuarto trimestre, dijo BofA.
No obstante, el banco advirtió a los clientes: “Decimos ‘vender la vacuna’ en las próximas semanas/meses porque creemos que estamos cerca del ‘totalmente alcistas’”.
Mientras tanto, en los bonos del Tesoro, el 73% de los inversores encuestados espera curvas de rendimiento más pronunciadas, es decir, cuando las tasas de las notas a largo plazo aumentan más rápido que las de corto plazo.
Para el 2021, los inversores nombraron a los activos de mercados emergentes “largos”, al S&P 500 y al petróleo como sus operaciones favoritas. Casi la mitad de los inversores encuestados por BofA dijo esperar que los mercados emergentes obtengan mejores resultados en el 2021.