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Nueva York (Reuters).- Los precios del petróleo cayeron pronunciadamente el lunes, porque los temores de que España se esté encaminando a un rescate y de que la crisis de deuda en la eurozona se esté propagando llevó a los inversores a vender activos que perciben como riesgosos.
El precio del barril de crudo Brent cayó más de un 3% y el de crudo estadounidense perdió más de un 4%, retrocediendo ambos por segunda sesión seguida, luego de que el banco central español señaló que la economía del país se hundió más en recesión en el segundo trimestre.
El anuncio el viernes de que la región española de Valencia solicitará ayuda al Gobierno central fue seguido el fin de semana por reportes de que Murcia parecía lista para imitar el pedido de asistencia.
"Hay temores de que esto podría ser el comienzo de un efecto dominó, que finalmente llevaría a España a unirse a Grecia, Portugal e Irlanda en el pedido de un rescate oficial", dijo Carsten Fritsch, analista del sector energético de Commerzbank en Fráncfort.
El barril de crudo Brent a septiembre perdía 3.83 dólares, a 103 dólares a las 1902 GMT, habiendo tocado un mínimo intradía a 102.42 dólares.
El barril de crudo estadounidense a septiembre cayó 3.69 dólares, a 88.14 dólares el barril, en su mayor descenso porcentual diario desde el 21 de junio y luego de haber tocado un mínimo intradía a 87.94 dólares.
El volumen negociado tanto para Brent como para crudo estadounidense siguió siendo bajo, de alrededor de un 30% menos que los promedios de los últimos 30 días.
Un factor que pesó sobre los precios fue el comentario de un asesor del banco central de China, que dijo que el crecimiento económico del segundo consumidor mundial de petróleo podría desacelerarse al 7.4% en el tercer trimestre.
El euro tocó un mínimo intradía de dos años contra el dólar el lunes por las preocupaciones que despierta España, y los rendimientos de los bonos españoles treparon a su nivel más alto en la era euro.
Los temores por España también hicieron caer los mercados bursátiles, con bajas en Wall Street que fueron más pronunciadas en los mercados europeos.
La violenta situación en Siria y las tensiones entre Irán y Occidente por el programa nuclear de la república islámica mantuvo a los inversores atentos a una potencial interrupción del suministro petrolero de la región.