El Dow Jones caía 1.48% en horas de la mañana. (Foto: AFP)
El Dow Jones caía 1.48% en horas de la mañana. (Foto: AFP)

Las acciones caían el martes en Wall Street, después de que datos mostraron que el sector manufacturero de Estados Unidos se contrajo en agosto por primera vez desde 2016, lo que agravó los temores de que la prolongada guerra comercial entre Washington y Pekín pueda llevar a la economía mundial a una recesión.

El Instituto de Gerencia y Abastecimiento (ISM, por su sigla en inglés) dijo que su índice de actividad manufacturera nacional disminuyó a 49.1, la cifra se compara con la estimación de 51,1 de analistas consultados por Reuters.

A las 14:16 (GMT), el Promedio Industrial Dow Jones bajaba 391,94 puntos, o un 1,48%, a 26.011,34 unidades, mientras que el S&P 500 perdía 30,94 puntos, o un 1,06%, a 2.895,52 unidades y el Nasdaq Composite caía 88,11 puntos, o un 1,11%, a 7.874,77 unidades.

Los débiles datos también presionaban a los rendimientos de los bonos del Tesoro de Estados Unidos y los retornos de la deuda referencial a 10 años caían a su menor nivel desde julio de 2016. Las acciones de bancos, que suelen verse presionadas en entornos de bajas tasas de interés, bajaban un 2%.

Los papeles del sector industrial, sensibles al comercio, retrocedían un 1,77% y los de firmas tecnológicas perdían un 1,38%.

En una escalada de su guerra comercial, Estados Unidos comenzó a imponer el domingo aranceles de un 15% sobre diversos bienes chinos y Pekín aplicó nuevos gravámenes al petróleo estadounidenses.

El índice S&P 500 cayó un 1,8% en agosto, su mayor descenso mensual desde mayo, después de que la escalada en las tensiones comerciales y la inversión de una parte clave de la curva de rendimientos de bonos del Tesoro de Estados Unidos, vista como una señal de una recesión, llevaron a los inversores a buscar activos de refugio.

Las acciones de empresas de energía perdían casi un 2% y era el mayor lastre entre los 11 principales sectores del S&P, debido a que la creciente producción de crudo de la Organización de Países Exportadores de Petróleo y de Rusia llevaba a un desplome de 4% en los precios del hidrocarburo.