Solo 264,000 de 8 millones de viviendas en el país están aseguradas contra terremotos

La madrugada del domingo las familias peruanas fueron sobresaltadas por un fuerte movimiento sísmico con epicentro en Loreto.

Si bien los daños materiales causados por el sismo de ocho grados de magnitud no fueron cuantiosos, se vuelve a poner en debate qué tan preparados estamos los peruanos para enfrentar las consecuencias de este tipo de desastres naturales.

La penetración de los seguros contra terremotos en el país aún es baja. De las aproximadamente ocho millones de viviendas que hay en el país, apenas 3.3% (264,000) están aseguradas, advierte la Asociación Peruana de Empresas de Seguros (Apeseg).

Además, teniendo en cuenta el alto grado de autoconstrucción que hay en el país, difícilmente esas viviendas son asegurables, advirtió Eduardo Morón, presidente de Apeseg.

En este contexto, el gremio presentó una propuesta para que sea obligatorio asegurar todas las viviendas contra terremotos. “Esta iniciativa ya la habíamos presentado al anterior ministro de Vivienda, y ahora conversaremos con el actual para ponerla en agenda”, reveló a Gestión.

La propuesta plantea que este seguro debería cobrarse a través de los recibos de luz o agua.

Mediante estos recibos es fácil distinguir a las familias de menores ingresos de las restantes y, por tanto, focalizar primas (precios de seguros) diferenciadas o subsidios, si el Gobierno quiere ayudar a las familias de bajos recursos, dijo Morón.

Esta propuesta debe ser coordinada no solo con el ministerio sino también con la Superintendencia de Banca, Seguro y AFP (SBS) y otros sectores involucrados, señaló. Añadió que el planteamiento de un seguro obligatorio, para plasmarse, necesita de una ley expresa del Congreso

Informales

El ejecutivo indicó que la propuesta está enfocada en la mayoría de familias que no tienen una cobertura para su vivienda.

Incluso construcciones informales podrían ser aseguradas, sostuvo.

Según un estudio del Ministerio de Vivienda, cerca del 70% de las casas que se construyen en el país son informales, es decir, edificadas por el propietario con la ayuda de un “maestro de obras”.

“Acá no interesa la vivienda que hoy la familia habita, sino que el foco está en cuál sería la vivienda que se le daría en caso ocurra una desgracia”, afirmó Morón.

Así, Apeseg propone analizar no el tipo de vivienda que tienen las familias, sino la indemnización que se les podría dar en caso de una catástrofe

Por ejemplo, a las familias damnificadas se les podría entregar módulos básicos que cuestan entre US$ 3,000 y US$ 5,000, como los que se están entregando en la reconstrucción del norte, dijo.

Seguros

Según Pacífico Seguros, asegurar una vivienda de US$ 100,000 cuesta, en promedio, US$22 mensuales. En tanto, un seguro para indemnizar los bienes de una casa que tienen un valor de US$10,000, puede costar alrededor de US$ 10 mensuales.