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Después de varias postergaciones en su conclusión, la nueva refinería de Talara tiene finalmente una fecha definida para su entrada en producción comercial: el próximo 15 de diciembre, según voceros de esa empresa estatal.
Explicaron que, hasta el momento, de las 16 unidades de proceso con las que contará esa nueva planta, ya once han sido recibidas por la petrolera estatal (de mano de su constructor, la empresa española Técnicas Reunidas), luego de concluir las pruebas respectivas.
En las siguientes semanas, añadieron, Petroperú espera recibir las otras cinco unidades de proceso faltantes, entre ellas, las plantas hidratadoras y de hidrógeno, que permitirán producir diésel con bajo contenido de azufre (50 partes por millón de ese componente químico).
Remarcaron que, de momento, no se prevén postergaciones para que la nueva refinería empiece a operar a partir del 15 de diciembre.
Vale indicar que la nueva planta tendrá una capacidad total para procesar hasta 95 mil barriles de petróleo crudo pesado por día, a fin de producir, entre otros derivados, diésel con menos contenido de azufre. La antigua planta, por su parte, podía refinar 60 mil barriles con alto contenido de azufre.
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Sin embargo, el área de prensa de Petroperú indicó que se va a informar próximamente si la nueva refinería empezará a procesar los 95 mil barriles diarios desde el primer día en que entre en operación, o si lo hará aun en menor volumen para alcanzar su producción plena posteriormente.
¿Qué dicen los especialistas?
Sobre el tema, diversos especialistas del sector hidrocarburos coincidieron en que no es de esperar que la nueva refinería de Talara empiece a producir a su máxima capacidad desde este 15 de diciembre.
El expresidente de Petroperú, César Gutiérrez, expresó sus dudas de que esa nueva planta alcance su producción plena en diciembre, en vista de que, por ejemplo, la refinería de Cartagena (Colombia) se demoró un año en refinar crudo a toda su capacidad, luego que concluyera su fase de pruebas.
Además, dijo tener información de que la refinería de Talara, cuando esté concluida, tendrá un factor de planta (capacidad de producción promedio) del 85%, y consideró que la empresa debe despejar las dudas y aclarar si podrá empezar a producir al 100% el mes entrante.
Estimó que más bien podría procesar petróleo a toda su capacidad aún para mediados del 2023.
Cabe señalar que la producción nacional de crudo hasta ahora no se recupera a los niveles precovid-19, pues en octubre alcanzó apenas los 33,378 barriles en promedio diarios, cerca de la mitad de los 61 mil barriles que se producían hasta febrero del 2020.
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En cambio, con una demanda nacional que bordea los 250 mil barriles diarios de petróleo, gran parte del requerimiento local debe ser importado, a mayor precio que el que puede ofrecer la producción local.
Por su parte, Carlos Gonzales Ávila, director-gerente de Enerconsult, coincidió en que no es previsible que la modernizada Refinería de Talara empiece a procesar a full de inmediato, dada la complejidad que tiene por tratarse de tecnología de última generación y sus múltiples sistemas de monitoreo, por lo que se espera que vaya aumentando su refinación progresivamente.
¿De dónde saldrá el petróleo que procesará la nueva refinería?
Además, un aspecto que falta determinar, anotó el especialista, es de qué fuentes se abastecerá de petróleo la planta que está próxima a entrar en operación, si usará crudo importado o si en algún momento habrá suficiente producción nacional que le abastezca a menor precio.
La mejor opción, según indicó, sería que pueda utilizar el petróleo que producen los cinco lotes de hidrocarburos cuyos contratos están por vencer en la cuenca de Talara.
No obstante, hasta ahora Perupetro no define las condiciones para el concurso que anunció convocaría a fin de año para entregar esos lotes vía licitación internacional al mejor postor.
Por su parte, Aurelio Ochoa, expresidente de Perupetro, consideró que si Petroperú logra acceder a esos lotes en asociación con una empresa privada con capacidad de invertir en aumentar su producción, podría obtener mejores márgenes de refinación que le permitan incluso bajar los precios de los combustibles a los consumidores nacionales.
Explicó que los lotes del noroeste tienen costos de producción entre US$ 25 y US$ 30 por barril, incluidos los pagos de regalías, y si la petrolera estatal logra contar con esa materia prima, le significaría márgenes de refinación (ganancia) considerando que hoy el crudo cotiza en US$ 85 por barril en el mundo.
Oleoducto
De otro lado, las fuentes de Petroperú indicaron que todavía se espera que entre febrero y marzo del 2023 Petroperú pueda retomar el transporte de petróleo a través del Oleoducto Norperuano, que permanece parado desde el primer trimestre de este año, luego que fuera objeto de sucesivos ataques y de que se rompiera su estructura en Loreto.
Cabe señalar que la parada de esa tubería no permite sacar la producción de lotes petroleros ubicados en Loreto, algunos de los cuales deben evacuar su petróleo mediante barcazas por ríos hasta el Atlántico, a través del Brasil, como el lote 95.