Aunque las acciones de los bancos argentinos se dispararon, analistas advierten que la caída en sus resultados del primer trimestre es un presagio del futuro, pues la galopante inflación pesará sobre los resultados en los próximos años.
Las ganancias de los bancos se desplomaron cuando las regulaciones impuestas a principios del año pasado les obligaron a tener más en cuenta el impacto del aumento de precios en sus balances. Los inversores que llevaron el índice bursátil Merval a un récord en cada una de las últimas cinco sesiones deberían prestar atención.
Los ingresos de siete bancos que cotizan en bolsa cayeron hasta un 81% en el primer trimestre respecto al año anterior; Grupo Financiero Galicia lidera los descensos. La razón fue simple: los precios al consumidor aumentaron un 11% durante los primeros tres meses del 2021, en comparación con 7.5% en el mismo período del 2020. Lo peor puede estar por suceder a medida que el Gobierno lucha por controlar la inflación, mientras establece tasas de interés mínimas sobre los depósitos para proteger a los ahorradores.
El banco central ahora decide sobre casi todas las fuentes de ingresos de los bancos: tasas, comisiones y dividendos, dijo Alejo Rodríguez Cacio, profesor de finanzas de la Universidad Torcuato Di Tella y UADE en Buenos Aires. Agregó que el margen de maniobra en los bancos es limitado.
Las pérdidas por inflación recortaron los resultados operacionales de Galicia en un 78% y los de Banco Macro SA en un 76%.
El segundo trimestre también parece sombrío para los bancos. Los precios al consumidor subieron un 4.1% en abril con respecto al mes anterior, en comparación con solo el 1.5% el año anterior. Los economistas prevén que la inflación cerrará el año en un 48.3%, frente al 36.1% del 2020, según la encuesta mensual del banco central publicada el viernes.
No obstante, no sería evidente detectar que el sistema bancario está en problemas si solo se observara el desempeño reciente de las acciones. La perspectiva de un renovado crecimiento después de la pandemia hizo que el índice bursátil Merval subiera un 18.3% en diez días, la mayor cantidad en un año. Algunas acciones bancarias están alcanzando niveles récord.
El cálculo parece ser muy sencillo.
Guillermo Navone, director de Centaurus SA, una corredora en Buenos Aires, dijo que los inversionistas ven todas las acciones argentinas como muy baratas porque creen que las condiciones económicas solo pueden mejorar y no empeorar, agregando que es independiente de los tiempos difíciles que atraviesan los bancos.