La Justicia brasileña ratificó hoy la condena por corrupción pasiva y lavado de dinero contra el expresidente Luiz Inácio Lula da Silva (2003-2010) en una causa relacionada con el escándalo en la petrolera estatal Petrobras.

La decisión, adoptada por un tribunal de segunda instancia de Porto Alegre, abre la puerta a la inhabilitación política de Lula y deja en manos de la Justicia electoral su posible candidatura presidencial.

Aún después de una decisión puede haber recursos en el mismo tribunal, antes de que el caso escale a cortes superiores. El tipo de recurso y el plazo para la decisión varía de acuerdo con la sentencia final.

Tras la unánime decisión de los tres jueces, el único recurso posible ante el tribunal son los llamados "embargos de declaración".

El instrumento sirve para revisar y aclarar puntos de la decisión y no cambia el resultado. Debe ser presentado hasta dos días después de la sentencia y su trámite es más rápido.