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El presidente de Ecuador, Daniel Noboa, ordenó el cierre de empresas y oficinas gubernamentales el jueves y viernes en medio de una paralizante falta de energía eléctrica antes de un referéndum nacional clave programado para el domingo.
Noboa atribuyó la medida sin precedentes a sequía, pero también al sabotaje, sin ofrecer pruebas. La crisis energética se suma inmediatamente después de una crisis de seguridad y una crisis fiscal que lo llevó a buscar ayuda del Fondo Monetario Internacional.
“Nos han dado palo y palo y palo sin parar, han querido fregarnos con sabotajes en el área eléctrica” para socavar el apoyo a su referéndum, dijo Noboa, de 36 años, en Atacames, una ciudad costera duramente golpeada por el aumento de la delincuencia que ha convertido a Ecuador en uno de los países más violentos de América Latina.
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El heredero de una fortuna exportadora de bananas, promercado, está pidiendo a los votantes en el referéndum del domingo que aprueben un mayor uso del Ejército, así como la extradición de ciudadanos ecuatorianos para luchar contra la delincuencia, y que anulen las prohibiciones constitucionales sobre el trabajo temporal y el arbitraje internacional.
La sequía está afectando a otras partes de la región en las que varios países como Ecuador dependen en gran medida de la energía hidroeléctrica. En Bogotá, capital de la vecina Colombia, el agua está siendo racionada, y el país ha dejado de exportar electricidad a Ecuador como medida para evitar sus propios apagones.
Ecuador enfrenta un déficit en el suministro de energía de 22 a 27 gigavatios hora a partir de este mes, informó la Presidencia. Debido a la sequía, los principales embalses para las centrales eléctricas, entre ellos Mazar y Paute, casi se han secado, mientras que la mayor central eléctrica, Coca-Codo Sinclair, tiene un caudal de agua un 40% inferior a la media.
Sin embargo, el Gobierno también culpó del problema a la exministra de Energía y Minas, Andrea Arrobo, a quien Noboa sustituyó con el ministro de Obras Públicas, Roberto Luque, el martes, y a otros 21 funcionarios por la crisis. El Gobierno prometió pagar la mitad de las facturas de electricidad de los consumidores correspondientes a este mes.
La crisis golpea la credibilidad de Noboa después de que la Asamblea Nacional aprobara en enero un proyecto de ley por la vía rápida denominado “ley no más apagones” que incluía un fondo para mantener la capacidad de generación termoeléctrica.
Bajo la presidencia de Rafael Correa, Ecuador pidió un fuerte préstamo a China para financiar una ola de construcción de centrales hidroeléctricas, prometiendo utilizar las empinadas laderas y las fuertes lluvias de las estribaciones andinas para generar energía limpia.
“Para resolver el problema, este es el momento de importar todos los generadores a diésel que hayan en el mundo, libres de aranceles”, recomendó Ortiz.
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