Junto al costo humano hay una factura económica, ya que los mercados emergentes tienen menos espacio para gastar y salir de los problemas.
Junto al costo humano hay una factura económica, ya que los mercados emergentes tienen menos espacio para gastar y salir de los problemas.

A principios de siglo, las economías en desarrollo eran una fuente de optimismo ilimitado y feroz ambición. Hoy Sudáfrica se recupera de una insurrección, Colombia ha sufrido protestas violentas y Túnez enfrenta una crisis constitucional. El gobierno antiliberal está de moda. Perú acaba de juramentar a un marxista como su presidente y las instituciones independientes están siendo atacadas en Brasil, India y México.