(Foto: Difusión)
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Beneficios. El 28 de diciembre, el Ejecutivo promulgó la norma que los empresarios agropecuarios esperaban desde hacía meses. El Decreto de Urgencia (DU) 043-2019, basado en un proyecto de ley aprobado por el disuelto Congreso, amplía hasta el 31 de diciembre del 2031 los beneficios tributarios y laborales de la Ley de Promoción Agraria (Ley 27360).

Con respecto al mencionado proyecto, hubo un cambio en el aporte a Essalud, que aumentará gradualmente desde 6% hasta equipararse al 9% del régimen general, a partir del 2029. Ya lo habían adelantado tanto la titular del , , como el del , Jorge Montenegro, de modo que la modificación no fue sorpresiva. Y los representantes gremiales se han mostrado de acuerdo. Para el presidente de Comex, Alfonso Bustamante, el aumento gradual del aporte permitirá al Estado monitorear sus servicios de salud (en el ámbito rural) e identificar dónde habrá que complementarlos.

Ahora que ya se tiene la certeza de las reglas y los plazos, el presidente de Erik Fischer, confía en que las empresas retomarán sus inversiones de mediano y largo plazo. El marco legal de la promoción agraria ha mantenido sus fundamentos por dos décadas y el resultado más notorio de esa estabilidad es que el 2019 las exportaciones agropecuarias no tradicionales completaron diez años consecutivos de expansión. Además, ha contribuido con formalizar el empleo en el campo y con elevar los ingresos de los trabajadores y las ganancias de las empresas.

Otro aspecto relevante del DU es que ratifica la inclusión de la forestería y la acuicultura, que gozarán de los mismos beneficios que el agro no tradicional. Lo que falta no es poco, pues se tendrán que redoblar los esfuerzos para desarrollar nuevos productos, abrir mercados y mantener el liderazgo en los actuales, además de extender la modernización de las actividades beneficiadas a la sierra y selva, pues hasta ahora el impacto ha estado principalmente en la costa.

También será necesario actuar con mayor celeridad ante obstáculos como los que se han presentado para la exportación de mango y cacao a la Unión Europea, y por supuesto, continuar mejorando la competitividad de las exportaciones vía la provisión de mejor infraestructura y reducción de costos logísticos y administrativos. Además, no se está haciendo lo suficiente para ampliar la frontera agrícola y un ejemplo de ello es la paralización de dos megaproyectos de irrigación (Majes-Siguas II y Chavimochic III). El ministro Montenegro ha planteado que el Gobierno nacional se haga cargo de su ejecución, una salida que merece analizarse.