Por Lucas Reaño
Consultor Senior y Coach Ejecutivo LHH DBM Perú
En un proceso de búsqueda de empleo, antes de pensar en las preguntas difíciles en una entrevista, un candidato debe estar seguro de causar muy buena primera impresión personal, basada en su autenticidad y preparación. Las empresas buscan a personas, que se aprecian, se ven justamente como son y tienen una buena propuesta de valor. Con esta gran base los candidatos pueden enfrentar las siguientes etapas con mayores expectativas y se darán cuenta que las llamadas “preguntas difíciles” no lo son tanto así.
En una entrevista de empleo, lo difícil no está en las preguntas, sino en las respuestas. Les comparto seis ideas para afrontar una entrevista de forma exitosa:
1. Metología SOAR: Para lograr una adecuada estructura, es recomendable aplicar la metodología SOAR (Situación, Obstáculos, Acción y Resultado), que usamos el LHH DBM y cuyo orden nos permitirá estar preparados para cualquier repregunta. Incluso nuestra respuesta podría ser sugestiva, invitando al entrevistador a que eventualmente nos repregunte algo que nos interesa para beneficiar nuestra presentación.
2. Preparación adecuada: Todo esto no se puede lograr sin una preparación especial, la cual nos sirva no solo para dar una respuesta muy bien estructurada y contundente, sino que ésta debe ser verdadera, responder a una real experiencia en tu carrera laboral y a lo que has sido capaz de aportar en cada organización.
3. El lenguaje corporal podría delatarte: Nunca intentes sorprender a un entrevistador; si mencionas algo que no se ajuste totalmente a la verdad, tu lenguaje corporal se encargará de delatarte y la entrevista puede terminar antes de lo previsto.
4. Tipo de entrevista: Debes tener en cuenta que en una entrevista tradicional, las preguntas están dirigidas a conocer cómo enfrentarías determinada situación, las cuales podrás responder acudiendo a tu mejor criterio, sin embargo en una entrevista por competencias, las preguntas estarán referidas a tus experiencias vividas, por ejemplo: ¿Cuénteme una experiencia en la cual tuvo que enfrentar una situación de crisis? ¿Dígame qué hizo, ¿cómo la resolvió?, ¿cuál fue el impacto económico que tuvo para su organización?, Y así como esta, otras preguntas que pretenden conocer el grado de experiencia y no sólo basta el criterio para responder, sino también saber resumir con mucha precisión un hecho que realmente experimentaste.
5. Preguntas difíciles o preguntas ambiguas: Tampoco confundamos preguntas difíciles con preguntas ambiguas, las cuales muchas veces toman de sorpresa a un entrevistado, por ejemplo ¿Cuántas pelotitas de tenis podrían alcanzar en esta sala?, con estas preguntas el entrevistador sólo pretende apreciar el alcance de tu raciocinio más que una cifra exacta.
6. Preguntas de prepación: Para que no dejes de prepararte, aquí tienes sólo 7 preguntas: para que te respondas en una hora, en un día, o en una semana, tú elijes, pero lo importante es que lo hagas:
1. ¿Cómo te describes?
2. ¿Por qué te debemos contratar?
3. ¿Qué te ha decepcionado de una organización y de tu jefe?
4. ¿Cuál fue tu contribución económica en el último año?
5. ¿Cuál es el trabajo más difícil que ha tocado hacer?
6. ¿Por qué no te deberíamos contratar?
7. ¿Cuál es tu fuerza motivadora?
Tus acertadas respuestas serán fundamentales para tu preparación y para comprobar que el problema no está en la dificultad de las preguntas sino en la sencillez de las respuestas. Recuerda que en esta coyuntura que afrontamos, es muy importante puedas prepararte para entrevistas virtuales para lo cual se requiere una preparación especial.
¡Éxitos en tu entrevista de trabajo!