La congestión vehicular es uno de los principales problemas que afecta a Lima. (Foto: El Comercio)
La congestión vehicular es uno de los principales problemas que afecta a Lima. (Foto: El Comercio)

La ministra de Transporte y Comunicaciones, María Jara, anunció –el último fin de semana– que mañana se dará a conocer al presidente de la Autoridad de Transporte Urbano para Lima y Callao (ATU), entidad que se encargará de integrar y articular el transporte público urbano de personas.

Fuentes cercanas a Gestión.pe indicaron que este puesto caería en las manos del , que trabajó en esta instancia hasta el 4 de agosto de 2016.

En este contexto, ¿cuáles serían las primeras medidas que deberá anunciar la ATU para enfrentar el problema de transporte? Como se recuerda, Lima pasó del noveno puesto a ser la tercera ciudad del mundo con más congestión vehicular, según un estudio de monitoreo holandés por GPS.

Ese mismo estudio arrojó que los limeños registran 58% de tiempo extra en cada viaje, en promedio. Así, para el presidente de la ONG Luz Ámbar, Luis Quispe Candia, el presidente de la ATU va a recibir una ciudad en la transitan 26,000 combis: 14,000 de Lima y 12,000 del Callao.

"Como este es un sistema tradicional, que está arraigado, con todas sus taras y lo más graves es que la mayoría de las combis son de empresas afiliadoras, cuyos asociados que no son propietarios de las unidades vehiculares, por lo que –en primera instancia– tiene que imponer orden", comentó.

Ante lo cual, sugirió como medida inmediata ampliar la ruta de los Corredores viales –especialmente del Corredor Rojo hacia Ventanilla– y del Metroplitano, específicamente de los alimentadores hasta el aeropuerto internacional Jorge Chávez.

"Lo primero que debe hacerse –desde la ATU– como ya no hay límite entre Lima y Callao, por ejemplo, disponer que el Corredor Rojo vaya más allá, si es posible hasta Ventanilla. Igualmente extender el servicio del Metropolitano, algo que debió hacerse hace mucho, pero nunca se tomó interés para que llegue hasta el aeropuerto. Específicamente, a través de un alimentador que vaya de la avenida  Tomás Valle hasta el Jorge Chávez", anotó.

A esta medida se sumaría –en opinión de Candia– que se ordene el aumento del número de unidades tanto de los Corredores Viales como  del Metropolitano.

"En el transporte tradicional, la gran mayoría de conductores no son propietarios de la unidad, por eso no cuidan con celo de que se cumpla los principios de tiempo de viaje y frecuencia. Sin eso no hay buen servicio. Ante lo cual  –desde la ATU– debe exigirse a las empresas para que lo cumplan, inclusive controlarla con GPS para que cumplan con el tiempo de viaje de un extremo a otro en la ruta,y que tenga frecuencia entre vehículo u otro", aseguró.

Para el especialistas con estas medidas inmediatas se prepara las bases de lo ya se está haciendo: el plan regulador y el plan maestro de transporte urbano para Lima y Callao. Opinó, asimismo, que no debería revocarse la ampliación a las autorizaciones de ruta de 300 empresas de transporte público hasta diciembre de 2019, realizada por el exalcalde, Luis Castañeda.

"Lo que debe exigirse es que el servicio sea eficiente y como ATU ya puede emitir norma; entonces tiene las herramientas para exigir a los actuales operadores a trabajar con eficiencia", argumentó.

Mesa de transporte se reactiva hoy, tras dos meses de paralización

A fines del año pasado el Gobierno de Vizcarra anunció como una muestra de su preocupación por abordar los problemas tránsito y del transporte de Lima y Callao la conformación de una Mesa Ejecutiva de Tránsito y Movilidad Urbana, la misma que articularía esfuerzos –entre el sector público y privado– para "identificar los problemas del transporte y la movilidad urbana así como proponer soluciones".

Esta Mesa ha venido trabajando hasta abril de este año, específicamente hasta la salida del exministro de Transporte y Comunicaciones, Edmer Trujillo. Desde entonces, se paralizó las reuniones de trabajo, dejando en 'stand by' propuestas y posiciones respecto a proyectos de ley que buscarían –por ejemplo– flexibilizar las condiciones para la emisión de las licencias de conducir.

En concreto, este grupo de trabajo dejo de funcionar –pese a que fue anunciada como una prioridad del Ejecutivo– por casi 2 meses, alertó el Luis Quispe Candia. Tiempo en la que incluso se dictó una norma –que pudo ser debatida al interior de este grupo– que

"Es una lástima que la Mesa Ejecutiva fuera suspendida por largo tiempo.  Esta e fundamentó desde el Ejecutivo que era por la salida del exministro Trujillo. No obstante, apenas se designó a la ministra María Jara, las reuniones continuaban suspendidas", manifestó.

Así, arguyó que la Mesa Ejecutiva de Transporte y Movilidad Urbana volverá a sesionar desde hoy, tras dos meses de paralización.