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En los últimos años el servicio de internet fijo ha tenido un crecimiento importante vía las mayores conexiones de fibra óptica. Actualmente se registran 1.5 millones de conexiones vía fibra óptica a nivel nacional. No obstante, aún la brecha es importante, si se tiene en cuenta el universo de 9.5 millones de hogares en Perú.
Si bien las compañías operadoras tienen ambiciosos planes de expansión de sus redes de fibra óptica, los cuales reportamos en un anterior informe, existe un factor de riesgo que preocupa, pues podría retrasar el avance de estas conexiones hacia nuevas calles de las ciudades.
El riesgo está relacionado al retraso de parte de las municipalidades para autorizar las conexiones en viviendas recién construidas, indicó Luis Acuña, director de marketing B2C de Movistar.
“En muchos casos, al tener que hacer nuevas expansiones, hay autorizaciones y permisología que nos retrasan. Eso es algo que estamos trabajando con las municipalidades, para lograr esas autorizaciones en un menor tiempo”, señaló al respecto Luis Acuña.
“Este es uno de los principales problemas que tenemos. Buscamos que cuando un edificio nuevo sea entregado a los clientes, podamos dar rápido el servicio de fibra óptica. Pues en muchos casos los clientes vienen con nosotros y nos preguntan por qué no fibramos el edificio más rápido, pero hay un problema de burocracia. Será importante que nos den facilidades para poder hacer llegar el servicio más rápido a los ciudadanos”, remarcó Acuña.
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En el caso de las viviendas que no son nuevas, la traba es mayor, pues hay zonas con exceso de cables aéreos en desuso, por lo que ante esta saturación de redes, las municipalidades demoran en dar autorizaciones para el tendido de la fibra óptica, indicó por su parte Víctor Jauregui, vicepresidente comercial de Win.
Refiere que la solución está en impulsar un retiro masivo de cables en desuso, pues el tendido aéreo de la fibra óptica es la vía más económica para la expansión de las redes.
“Si se hiciera un tendido soterrado (bajo tierra) de las redes, el costo de implementación es mucho mayor, de 20 a 1, respecto al tendido aéreo, lo cual haría inviable la expansión de las redes para muchas zonas”, subrayó Jauregui.
“Debemos incentivar la limpieza de los cables en desuso, ese es el gran problema, antes de bloquear el desarrollo del mercado de telecomunicaciones, pues sino el usuario sería el perjudicado al no poder acceder a esta tecnología”, remarcó.
Por ello el ejecutivo agregó que está en coordinaciones con las compañías de telecomunicaciones y municipios para iniciar diversas campañas de retiro de cables en desuso.
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En esa línea, el distrito de Magdalena ha sido uno de los primeros en tomar esta iniciativa. Así, en agosto pasado la Municipalidad de Magdalena informó sobre el retiro de 65,000 metros de cables en desuso de Telefónica, y 29,070 metros de la empresa Claro.
“El objetivo es garantizar el orden y la seguridad en las vías públicas; y avanzar con el reordenamiento de la fibra óptica para tener una ciudad más segura”, señaló la Municipalidad en un comunicado.
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Licenciado en periodismo de la PUCP, con más de diez años de experiencia en medios de prensa escritos y digitales.