Una de las compañías que ha abanderado el compromiso climático durante el congreso de móviles ha sido la operadora Vodafone, bajo el lema “Digital for Green”. (Photo by Josep LAGO / AFP)
Una de las compañías que ha abanderado el compromiso climático durante el congreso de móviles ha sido la operadora Vodafone, bajo el lema “Digital for Green”. (Photo by Josep LAGO / AFP)

La emergencia climática apremia y el sector tecnológico tiene su parte de responsabilidad, tanto por su capacidad de contribuir a mitigarla como por sus emisiones contaminantes, y por ello la transición ecológica se ha hecho un hueco en el Mobile World Congress de Barcelona (España).

Junto a la realidad virtual, el 5G o los metaversos, el medio ambiente y la sostenibilidad se han abierto paso, con mayor o menor timidez, en el MWC de este 2022 con la presentación de múltiples iniciativas y soluciones tecnológicas orientadas a alertar del impacto de nuestra huella de carbono y ayudar a combatir el cambio climático.

Se estima que la industria tecnológica es responsable de entre un 3.5% y un 4% de las emisiones globales de gases de efecto invernadero (GEI), situándose por encima de sectores como el transporte aéreo, y que el sector de las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC) es actualmente responsable del 10% del consumo total de electricidad en la Unión Europea y de un 4% de sus emisiones de CO2.

Asimismo, se predice que la Inteligencia Artificial podría consumir una décima parte de la electricidad mundial en el 2025.

Una de las compañías que ha abanderado el compromiso climático durante el congreso de móviles ha sido la operadora Vodafone, que bajo el lema “Digital for Green” ha presentado en su estand -presidido por un jardín vertical de 48 m2- hasta 10 demostraciones basadas en tecnologías de red claves para la transición verde.

De entre ellas, sobresale el “bosque inteligente” que la operadora ha creado en Rumanía junto con una empresa emergente para evitar la tala ilegal.

La solución, que se ha aplicado en un extenso bosque de los Cárpatos rumanos que solo cuenta con dos guardias forestales para vigilarlo, está basada en unos sensores conectados a internet que se instalan en los árboles y son capaces de detectar y alertar de furtivos.

Abastecido con energía solar y geolocalizado, el sensor dispone de un micrófono con un alcance de un kilómetro y, gracias a la Inteligencia Artificial, es capaz de detectar ruidos anómalos, como el de un coche o el de una sierra mecánica, y alertar al guardabosque para que se desplace hasta el lugar.

Para sensibilizar sobre la huella de carbono generada por los mismos congresistas del Mobile, la empresa española Sygris ha instalado un espacio donde los asistentes pueden calcular el impacto en carbono que generan y, mediante la aplicación móvil Tribaldata, tienen la oportunidad de compensarla plantando gratuitamente un árbol.

Por su parte, Atos ha presentado su aplicación móvil Terra2, dirigida a gobiernos y agencias públicas, que ofrece acceso rápido a información ambiental y científica para ayudar en la toma de decisiones en la lucha contra el cambio climático.

También en la lucha para reducir las emisiones de CO2, Fujitsu ha anunciado que ha desarrollado con éxito una nueva tecnología de red de acceso de radio virtualizado (vRAN) -la parte del sistema de telecomunicaciones que conecta los dispositivos individuales a la red global- con soporte 5G que permitiría reducir las emisiones globales de CO2 del sistema en un 50 % o más en comparación con los sistemas de estaciones base convencionales para 2025.

La finlandesa Nokia ha ido más allá y ha presentado una nueva estación base refrigerada con agua, en lugar de aire, que permite reducir hasta en un 90% el consumo de energía del sistema de refrigeración y en un 80% las emisiones de CO2, a la vez que el agua caliente que se genera en el proceso puede ser reutilizada en los sistemas de calefacción de los edificios donde se encuentre.

Para impulsar la economía circular, Telefónica y Éxxita Be Circular, una empresa española dedicada a reparar y alargar la vida útil de dispositivos tecnológicos, se han aliado para lanzar el ‘Pasaporte Verde Europeo’, basado en tecnología ‘blockchain’ (cadena de bloques), que garantiza la trazabilidad completa y la información fiable y contrastable sobre la durabilidad de terminales de segunda mano.

El ‘blockchain’ también es la tecnología empleada por la empresa emergente Vidris, la ganadora de la iniciativa “Hack The Planet” organizada por la Mobile World Capital Barcelona (MWCapital), que ha ideado un pasaporte digital que premia a los consumidores por la compra de productos sostenibles, ayudando a empresas ecológicas a generar valor de marca.

Más allá de las soluciones concretas presentadas, y a riesgo de que se trate de un lavado de imagen verde, a lo largo del congreso han sido muchas las empresas que han reiterado su compromiso de alcanzar la neutralidad climática a corto o medio plazo, demostrando que la transición ecológica no es una cuestión del futuro, sino de presente.