La misión ha finalizado para Fedor, el primer robot humanoide de Rusia enviado al espacio, quien ya no será utlizado en futuras misiones y lo reemplazará un sucesor de modelo más apropiado, anunciaron este miércoles sus creadores.

"No volará más, ya no tiene nada más que hace ahí arriba, cumplió con su misión", señaló a la agencia oficial de prensa Ria Novosti, Evgueni Dudorov, jefe del equipo que desarrolló a Fedor.

El robot humanoide regresó a la Tierra a comienzos de septiembre tras pasar más de una semana a bordo de la Estación Espacial Internacional (ISS).

Según los científicos, el robot antropomórfico, que mide 1.80 metros de estatura y pesa 160 kg, no puede reemplazar a los cosmonautas en misiones consideradas peligrosas, como es el caso de las caminatas espaciales.

Fedor, acrónimo de Final Experimental Demonstration Object Research, es capaz de reproducir movimientos humanos y puede ser controlado a distancia. Pero no puede desplazarse en condiciones de ingravidez y sus largas piernas se han revelado inútiles a bordo de la ISS.

Según Dudorov, los ingenieros rusos ya están diseñando a su reemplazante, que "deberá responder a las exigencias de trabajo fuera de la estación".

La agencia espacial rusa Roskosmos espera poder utilizar la robótica en operaciones delicadas, tales como las caminatas fuera de la ISS y, eventualmente, para "conquistar el espacio lejano".

Portando el número de identificación Skybot F850, Fedor es el primer robot humanoide enviado al espacio por Rusia. Había sido precedido en 2011 por Robonaut 2, de la NASA, el que finalmente regresó a la Tierra en 2018 a causa de problemas técnicos, y también por el pequeño robot japonés Kirobo, en 2013.

La construcción de Fedor, originalmente concebido para el ministerio de Situaciones de Emergencia de Rusia, encargado sobre todo de la lucha contra los incendios y de los rescates, tuvo un costo de unos 300 millones de rublos, según los medios de comunicación rusos.