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Telegram es una aplicación legítima basada en una tecnología pensada para garantizar la privacidad y confidencialidad de sus usuarios.
Sin embargo, como otras tecnologías, que nos son pensadas con un fin malicioso, son aprovechadas por los cibercriminales para compartir y ofrecer productos ilegales, señaló a gestion.pe Camilo Gutiérrez, jefe del Laboratorio de Investigación de ESET Latinoamérica.
La app de mensajería instantánea gratuita, de código abierto y basada en la nube, que ganó una gran popularidad al ofrecer mensajes y llamadas cifrados de extremo a extremo para que los ISP y otros terceros no puedan acceder a los datos, son usadas para esconder las acciones de los criminales.
“Estas características que son muy apetecidas por nosotros como usuarios, que nos aseguran que lo que nosotros enviamos no va a ser utilizado por alguien diferente a lo que estamos esperando”, comenta Gutiérrez.
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“Lo que es aún más desconcertante es la cantidad de usuarios a los que llega esta información, ya que algunos grupos tienen cientos de miles de miembros, abriendo el nuevo mercado ilegal a una gran audiencia”, comenta.
¿Qué ofrecen?
De acuerdo con ESET, dentro de los servicios ilegales que han identificado en Telegram, se tiene desde venta de drogas, dinero falso, venta de información de tarjetas de crédito robadas y datos personales, incluso hasta servicios de sicarios.
“Esto es muy similar a lo que se veía hasta hace un tiempo exclusivamente en los mercados de la dark web. Ahora vemos cómo los cibercriminales comienzan a cambiar un poco su forma de operar y se mudan hacia aplicaciones que les siguen permitiendo mantener el anonimato pero que son utilizadas por más usuarios”, advirtió.
Al ser consultado si las redes sociales pueden ser tan peligrosas como las webs dark, el ejecutivo de ESET señala que, como resultado de sus investigaciones y entendiendo cómo actúan estos grupos cibercriminales, “nos hemos dado cuenta de que siempre apuntan a utilizar tecnologías que les garanticen el anonimato al momento de hacer sus transacciones y una gran cantidad de usuarios”.
“Entonces, donde veamos plataformas o aplicaciones que reúnen estas características, es muy probable que los cibercriminales empiecen a utilizarlas para mover sus campañas”, precisa.
Desde su experiencia, esto se convierte en un juego de probabilidades, “donde estén esas condiciones dadas van a tener una mayor posibilidad de éxito en sus acciones y por eso es veremos que migran a esas plataformas o aplicaciones”.
¿Cómo prevenir?
Estas plataformas tienen la posibilidad de que, como usuarios, podamos reportar este tipo de grupos o publicaciones que tienen contenido ilícitos.
“No puede haber un monitoreo constante de los mensajes por parte de la aplicación, porque precisamente esa es la filosofía de privacidad con la cual es generada esta tecnología. Sin embargo, sí ponen a disposición de los usuarios poder reportar este tipo de grupos y cuando son identificados los bloquean para poder cortar con este tipo de acciones ilegales”, recomendó Gutiérrez.
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