Adriana Giudice eligió ser abogada con la ilusión de llegar a los tribunales como en las películas. Sin embargo, nunca ha llevado un juicio y la única vez que le tocó asistir a la Corte Suprema, se desencantó del sistema. Se dedicó al derecho corporativo y luego se convirtió se convirtió en CEO de Austral Group. Desde esa posición inicia esta entrevista y lamenta las pérdidas sufridas durante las manifestaciones.
¿Cuál es su posición frente a la coyuntura?
Una empresa no puede ser exitosa en un país que se está desangrando. La falta de institucionalidad nos ha llevado a este desastre. El país no se merece tanta inestabilidad. Aunque no hemos hecho buenas decisiones como ciudadanos, tenemos el poder de elegir.
¿Cómo deben actuar los empresarios al respecto?
Tenemos que jugar un rol mucho más activo en lo que pasa en el país. Y cumplir un compromiso con sus diferentes stakeholders, principalmente sus trabajadores o las comunidades en las que operan.
¿Qué es lo que más le preocupa de la pandemia?
Cómo las mujeres se han visto afectadas. Se redujeron los empleos en los que suelen participar y aumentó la carga laboral en el hogar. También la violencia que se ha desatado.
¿Cómo cambiar esa situación?
El cambio solo se va dar si los hombres se comprometen y asumen su responsabilidad en el hogar porque sino las mujeres no tienen el mismo espacio para desarrollarse.
¿Qué tan lejos estamos de eso?
Lejos todavía, pero miro con esperanza el futuro. Los jóvenes están avanzando y se están olvidando del “yo ayudo en casa”, porque no es ayuda, es un deber.
¿El machismo la ha alcanzado a nivel laboral?
Siempre me he sentido respetada a nivel profesional. Pero sí recuerdo los comentarios de un socio del estudio de abogados donde trabajaba que me hacía sentir mal.
¿Qué decía?
“Ay, Adriana, ¿con quién dejas a tu hija? Pobrecita, debe estar solita. ¿Quién la llevará a las actuaciones?”. Entonces echaba limón a la herida y desarrollaba esa culpa que sentimos las mamás que trabajamos.
¿Ser gerente en un sector operado en mayoría por hombres es complicado?
Tal vez la mayoría no me veía como gerente general al principio. Pero ya había desarrollado relaciones personales muy buenas. Es importante que las personas confíen y aprecien a su líder más allá de lo profesional.
Pasando a otro tema, dice que uno de sus hobbies es leer...
Sí, me gusta mucho aunque últimamente solo leo artículos y periódicos de diferentes partes del mundo. Están pasando tantas cosas en el mundo que no logro tener la paz necesaria como para meterme en un libro.
¿Cómo pasó de ser abogada a gerente general?
Cuando los noruegos compran la empresa vieron que como gerente legal estaba metida en todos los ámbitos de la compañía. Mi misión era dar asesoría preventiva a todas las áreas y lo valoraron.
Lleva ya muchos años en el cargo, ¿a qué debe el éxito de su gestión?
Está ligado al equipo que tengo. No pretendo saber más que ellos en sus propios campos y actúan con mucha libertad pero coordinados para tomar decisiones.
El Dato
Labor. Adriana Giudice ofrece charlas como líder empresarial a jóvenes afectados por el desempleo durante la pandemia. Austral Group ha otorgado más de 100 becas en alianza con Forge Perú. “Desarrollamos habilidades blandas y técnicas de los chicos para insertarlos en el mercado laboral”, comenta.