Redacción Gestión

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¿Cuánto han cambiado las prioridades de las empresas ante la situación de EE.UU.?Las inversiones más interesantes estarán en innovación y emprendimiento. La segunda prioridad está en los descubrimientos de gas natural, que llevarán a un resurgimiento de a bajo costo en Estados Unidos, pero usando tecnología más moderna.

Si los vemos en el corto plazo, el mundo de los y de innovación es emocionante y dinámico. Si vemos a nuestros propios graduados, por ejemplo, el año pasado, un 40% de ellos han ido a trabajar a start-ups o empresas bastante jóvenes, especialmente en el espacio tecnológico.

¿En qué sectores crecen las start-ups de EE.UU.?En tecnología, pero en una definición más amplia. Algunas de ellas están en servicios web o reinventando espacios existentes usando . Muchas se enfocan en desarrollar equipos, en el sector salud por ejemplo, o para otros usos de la tecnología existente.

¿Qué diferencias ha encontrado en la gerencia de negocios a nivel global?Un aspecto interesante de es que hay una cultura que sabe aceptar el error. Si vas a innovar, hay una gran posibilidad de que falles. En algunas regiones, lo que hemos descubierto es que los fracasos no son tan aceptados, y eso es algo cultural. Si quieres ser innovador, hay que entender de que también viene con el riesgo de fracasar.

¿El financiamiento es un problema global para innovar? Lo que vemos es que, en realidad, no hay una gran escasez de capital. El problema es que no todas las compañías saben presentarse ante los proveedores como candidatas para recibir inversión.

¿Cómo se innova en un país con grandes brechas de infraestructura tecnológica?Creo que el proceso es más interesante. Es más frecuente ver que la gente tiene que ser más porque las formas de tecnología que pueden usar para alcanzar una mayor audiencia son distintas a las que se usan en otras partes del mundo.

¿Los resultados no se ven limitados por estas brechas? En estos mercados hay innovaciones incluso más interesantes que aquellas en las economías desarrolladas, porque la gente tiene que ser más creativa. Lo ves en la banca móvil en celulares simples y en aplicaciones que informan sobre precios de bienes, o disponibilidad del agua, con mensajes de texto.

¿Qué casos resaltaría?Por ejemplo, la mayoría de empresas en Silicon Valley están haciendo productos para Internet con anchos superiores de banda. Pero si vas al oeste de África, ves otras soluciones, donde la gente usa mensajes de texto y hace aplicaciones poderosas para quienes esa es la única plataforma disponible.

¿Qué representa el aniversario de ESAN para Stanford?ESAN tuvo un comienzo bastante modesto hace cinco décadas, con 50 estudiantes por clase. Ahora el campus ha crecido y han agregado un programa de pregrado. Hoy es una universidad completa. Este gran y acelerado crecimiento también es consistente con el de la economía peruana en la última década. Cuando veo a ESAN hoy, así como lo que pasa en , veo que la globalización de la educación en gerencia es real.

¿A qué otros países está llegando Stanford hoy?Al oeste de África, en Ghana, hemos inaugurado un instituto que creamos hace 18 meses: el Stanford Institute for Innovation in Developing Economies. Nuestra tesis es que los gerentes de las empresas jóvenes exitosas se convierten en los agentes del crecimiento en sus economías. El siguiente mes estaremos en Bangalore, India, donde lanzaremos el programa Stanford Ignite.

¿Qué lecciones quieren llevar a estos países?Stanford y Silicon Valley van de la mano y son una fuente excepcional de innovación. Hay muchas start-ups que han salido de la universidad y han alimentado su crecimiento. , , y vienen de ahí y son el resultado de aceptar la innovación.

¿Qué esperar de una clase de negocios en Stanford?Trabajamos con casos de innovación y emprendimiento con empresarios destacados. La aproximación experiencial, en la que aprendes de quienes ya han hecho lo que tú, es una manera muy poderosa para enseñar a hacer empresa.

"Las escuelas de gerencia deben ser globales"Garth Saloner, decano de Stanford Graduate School of Business, visitó ESAN durante la semana de celebración de sus 50 años de fundación. Para el académico, "lo más interesante que se está desarrollando en la oferta de posgrados es la disponibilidad online".

Y esto tiene que ver, sobre todo, con el impacto de la globalización en la educación. "Hace año y medio comenta Saloner, tres de mis colegas decidieron que, en lugar de dictar sus clases solo a sus alumnos de Stanford, estarían disponibles para todo el mundo en Internet: unas 350 mil personas se inscribieron. Ese fue el comienzo de lo que es una revolución de la educación online".