El poder de los promotores de marcas

Los promotores o prescriptores de marcas están en todas partes sin que usted se de cuenta; se ven exactamente como la gente normal. Usted podría estar sentado junto a uno de ellos mientras lee este artículo. Donde quiera que esté y cualquiera que sea su línea de negocio, lo más probable es que en poco tiempo, alguien que conoce va a desatar "el poder de la promoción" en usted. O tal vez ya lo hicieron…

Y según un artículo en el portal Social Media Today, el detalle es que los promotores de marcas no llevan uniformes o distintivos; sin embargo, cuando le cuentan sobre su nuevo auto, el best-seller que tiene que leer, lo último de los smartphones – o cualquiera de sus marcas favoritas – usted confiará en su juicio y los escuchará. Usted confía en ellos porque pueden ser algún amigo, hermano, compañero de trabajo, vecino, o gente común y corriente como usted. De eso se trata la promoción de marcas.

¿Por qué es importante esta promoción para su empresa u organización?

Es importante porque cada una de las personas que conoce puede convertirse en promotor de su organización y marca, algo así como un promotor que "trabaja" para usted.

Las personas con el potencial de ser sus mejores "influenciadores" ya están trabajando para usted, y en el mundo globalizado de hoy, la forma más poderosa de aprovechar esta promoción boca a boca (word of mouth, para los amantes de los anglicismos) es a través de las redes sociales, señala el autor del artículo Mike Bailey.

En promedio, cuando los empleados comparten algo con sus redes sociales, cada uno llega a 20 veces más personas de lo que lo haría la forma tradicional de compartir marcas con el mismo número de seguidores, de acuerdo a datos de la Universidad de Stanford y Ignite Social Media.

¿Pero cuáles son los principios para guiar a estos promotores?

LiderazgoComo en cualquier otra iniciativa empresarial, es fundamental que los líderes de la organización creen una cultura adecuada en la cual todos se mantenga involucrados. Si su empresa no usa las redes sociales como un elemento esencial para su negocio, no tendrá mucho éxito con sus promotores.

Objetivos clarosEs necesario, no opcional, alinear su programa de promotores de marca con los objetivos corporativos. Un objetivo claro le permitirá medir resultados específicos.

Impulsor de promotoresEs muy difícil que pueda manejar personalmente toda esta actividad; necesita a alguien con quien compartir la carga. Tiene que ser alguien que está tan entusiasmado como usted con la idea de entrenar promotores, y debe ser alguien que puede relacionarse con la gente a diario. En resumen, necesita un impulsor de promotores de marca.

Formación y política de la empresaAntes de capacitar a su gente con el contenido necesario y "soltarlos" en las redes sociales, asegúrese de haberlos entrenado con eficacia. Además de explicar la mecánica del programa y la forma de usar las herramientas que le proporciona, debe explicarles la política de su organización sobre el uso de las redes sociales con fines empresariales.

Generación de contenidoAlgunas organizaciones comparten el contenido existente, ya sea propio o de terceros, para promover sus productos, creando así un centro de contenidos. Sin embargo, cada vez más empresas se dan cuenta de la dificultad de enfocarse en las redes de sus empleados con un contenido generalizado, por lo que crean elementos con un atractivo más específico.

Uso compartido de contenidoAhora que tiene a todo su equipo listo para compartir información en su nombre, facilite su labor. Chris Boudreaux, co-autor de "The Most Powerful Brand on Earth" (La marca más poderosa en el mundo), compiló una excelente lista de las plataformas líderes para employee advocacy (Término en inglés).

Medición de resultadosSi usted no tiene intención de medir la efectividad de su programa de promotores, no se moleste en ponerlo en marcha. Usted necesita saber cuántas veces las personas comparten el contenido, cuántos clics se generan en las redes de Internet y quienes son los promotores más activos y exitosos.