Redacción Gestión

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Todas las organizaciones valoran la creatividad, sobre todo cuando la tecnología cambia constantemente las perspectivas empresariales. Así lo afirman 1,500 directivos de 60 países, según una .

Pese a ello, la inversión en investigación y desarrollo ha sido recortada en 20% en el PBI de EE.UU. desde finales de 1980, publicó Anne Kreamer, vicepresidenta de Nickelodeon, en su blog del Harvard Business Review. Pero Kreamer no es del todo pesimista sobre las nuevas generaciones de innovadores y creativos, y propone tres consejos para reavivar la creatividad, tomados del fundador de Apple, Steve Jobs, y del escritor Charles Dickens.

Cosas simplesEl primer paso es no estresarse demasiado. Un estudio de la Escuela de Negocios de la Universidad de Washington reveló que el estado mental óptimo para afianzar la creatividad es un punto medio: no demasiado feliz ni demasiado ansioso o estresado.

Para lograr tal estado es recomendable salir a caminar. Y no solo caminar de un lado a otro en un mismo cuarto, sino salir a lugares poco familiares. Una visión estrecha de un problema responde a percibir estímulos en espacios limitados. Eso sucede cuando no se sale de la oficina.

Charles Dickens caminaba varios kilómetros cada noche, rutina sin la cual él "explotaría y perecería". Bajo un seudónimo, Dickens escribió: "No hay nada que disfrutemos más como una pequeña vagancia amateur, caminando en Londres como si fuera una región desconocida a nuestra mente distraída".

Por su parte, Steve Jobs definió la creatividad como la capacidad de conectar diferentes experiencias. "Mucha gente en nuestra industria no ha tenido experiencias diversas. Entonces no tiene suficientes puntos que conectar. Mientras más grande sea su visión de la experiencia humana, hará mejores diseños", dijo en un .

El último consejo es, entonces, dejar volar la imaginación. Cuando uno es joven, el camino al éxito requiere aprender hábitos de disciplina y concentración. Pero una vez adquiridos, es preciso tener disciplina para ver las cosas de una nueva manera y conectar experiencias bajo nuevas perspectivas. Kreamer lo define así: "Si no, corremos el riesgo de convertirnos en infalibles, pero monótonos y faltos de creatividad".