Desde la cabina de control, el vestuarista Pepe Corzo ve el ensayo de cada ceremonia de junto a su director. “Es un momento de adrenalina ver a los voluntarios con los 2,000 trajes (de la calusura)”, explica Corzo.En total, se han producido 5,000 trajes para los eventos de los Juegos Panamericanos y Parapanamericanos.

Es que asumir el puesto de diseñador de vestuario y utilería en Lima 2019 es el proyecto hasta ahora más grande e importante de su carrera que empezó a los 18 años. “Tengo más de un año y medio trabajando en esto. Mis proyectos más ambiciosos habían tardado hasta10 meses”, agrega.

Más práctica que teoría

Pepe Corzo es autodidacta. Pasópor varios institutos y de todos desistió. No tiene un documento que lo acredite como diseñador, pero ha aplicado sus 27 años de experiencia en escenarios para hacer del evento deportivo “una lotería fríamente calculada”.

“Dedico el 50% de mi tiempo a la elaboración de vestuarios para espectáculos: teatro, ballet, ópera, zarzuela. He trabajado en más de 100”, detalla Corzo.

La otra mitad del tiempo ejerce como director de arte de televisión y fotografía. “Hago comerciales.La publicidad en Lima ahora está en un momento muy profesional y sofisticado”, explica.

Corzo trabaja también en Europa, pero prefiere por sus talleres, insumos y fábricas: “Aquí puedo preparar mil cosas que si viviese en París no tendría acceso”.

De hecho, como anfitrión del equipo creativo que llegó al país, Corzo diseñó un tour que incluía y Caquetá. “Les encantó e inspiró porque, al final, es como una inyección a la vena de lo que somos en Perú: la riqueza del color y del sonido”, cuenta el declarado fanático del imperio textil.

Hipnotizar para convencer

En lugar de hacer solo dibujos y bocetos que no se entiendan, Corzo presenta prototipos tridimensionales. “Los hago con materiales reales. Es mi metodología de trabajo. Eso funciona porque impacta y se aprueba rápido”, explica.

Además, “ahorra muchas etapas. Por eso hemos podido avanzar más rápido esta producción”, confiesa.

Corzó buscó al menos 50 proveedores, “si no son 100”. “He sido muy riguroso con la selección de colores. Tengo muy clara mi visión de Perú. Sé cuáles son nuestros turquesas, verdes, fucsias y amarillo oro. Toda la tecnología que se aplica en el escenario puede ayudar a potenciar o minimizar los materiales que escojo”, sentencia.

Estampados en alto relieve, corte láser, bordado computarizado y acrílicos reflectivos que parecen espejos fueron algunos de los efectos buscados. “En una máscara hay tres tipos de dorado: Uno es espejo, el otro es mate texturizado y el otro es oro viejo”: detalla. Es que “crean tridimensionalidad al acesorio. Parece que fuera tallado en oro”, comenta Corzo.

“Este es un espectáculo en el que debes cautivar e hipnotizar”, admite. “Mi vestuario no es solo decorativo, sino también prácticos y cinético”, pues este y la coreografía se inspiran mutuamente.

“Recuerdo que mi primera colección “Mentira” fue copiada en Gamarra y se vendía por S/.5 o S/10. Primero me chocó, ahora soy su fan”.


En Corto

Miradas. Nico Lacusacus se encarga de la clausura de los Juegos Panamericanos y Hanel Cereza de la inauguración de los Juegos Parapanamericanos. “Son distintas visiones de los directores. Podríamos hacer 100 ceremonias y todas distintas e interesantes”, señala Corzo.