Perú es uno de los países con la tasa más alta de emprendimiento juvenil pese a afrontar una serie de obstáculos como acceso al crédito, escasa educación financiera o poca asesoría en gestión empresarial.
Así, Wille Fernández, fundador de Mefer Novios, y Alan Turpo, propietario de Alpafina, comentaron a Gestión las experiencias vividas durante la creación y desarrollo de sus negocios.
Obstáculos
Mefer Novios es una empresa dedicada al diseño, confección y venta de trajes y accesorios para novios.
“La principal dificultad fue no poder acceder a una línea de crédito para poder empezar mi empresa”, dijo Fernandez.
“No apostaban por mí, debido a mi corta edad, y porque además no contaba con un aval ni cumplía con la excesiva documentación para obtener el financiamiento”, agregó.
Según Fernández, la competencia no representa un obstáculo para el desarrollo de su negocio pues sus diseños son exclusivos y el asesoramiento que brinda es integral.
Por su parte, Alpafina es una marca que elabora prendas artesanales de alpaca, como chompas, ponchos, mantas y capas.
“No considero que la obtención de financiamiento sea un problema, pues hay muchas entidades financieras y organizaciones que apoyan al joven emprendedor”, señaló Turpo.
Sin embargo, el microempresario identifica cierta competencia desleal en el mercado en que se desempeña.
“Hay quienes copian los diseños que ofrecemos y los ofrecen a precio inferior”, afirmó.
El último lunes, ambos jóvenes fueron galardonados en el “XIV Premio Citi" que organizó Citi Perú junto a Aprenda. Wille Fernández recibió el premio “Joven empresario” mientras que Alan Turpo fue reconocido como “Empresario innovador”.
Objetivos
Fernandez indicó que su emprendimiento le permite fijarse objetivos tanto de crecimiento como de ahorro.
“Toda la utilidad se distribuye con la finalidad de poder desarrollarnos, así podemos cubrir obligaciones, reinvertir y ahorrar”, refirió.
A la fecha, Mefer Novios cuenta con cinco tiendas en Arequipa y tiene en proyecto establecer una tienda en Lima. Asimismo, Tacna, Juliaca y Cusco están en los planes de expansión.
El sur es un nicho de mercado para este negocio, manifestó el emprendedor.
En tanto, Turpo mencionó que, por ahora, se está dedicando a reinvertir los ingresos de su negocio con el fin de mejorar su productividad y crecer.
“He logrado sistematizar algunas máquinas de uso manual. Si antes necesitaba de dos a cuatro personas para operar las máquinas, ahora un solo trabajador puede manejar de 10 a 12 máquinas”, señaló.
Inventarios
Ambos jóvenes comentaron que el manejo de sus finanzas e inventarios es el rubro que les falta fortalecer y en el que requieren mayor asesoría pues lo hacen a través de libros de cuentas o sistemas básicos de Excel.